Si los resultados de la prueba de Papanicolaou son positivos, significa que el médico ha encontrado células anormales o inusuales en el cuello uterino. No significa que tenga cáncer de cuello uterino.
La mayoría de las veces, el resultado anormal de la prueba significa que ha habido cambios celulares causados por el virus del papiloma humano (VPH). Se trata de la infección de transmisión sexual (ITS) más común, y puede estar relacionada con el cáncer de cuello de útero. Los cambios en las células del cuello uterino causados por el VPH pueden ser leves, moderados o graves.
¿Necesitaré más pruebas?
Su médico revisará los resultados de sus pruebas y se lo comunicará. Su respuesta dependerá del tipo de células anormales que se encuentren en tu cuello uterino. Las más comunes se enumeran a continuación.
Células escamosas atípicas de significado indeterminado (ASCUS). En la superficie de un cuello uterino sano crecen unas células finas y planas denominadas células escamosas. El ASCUS se produce cuando estas células no son típicas... Su médico realizará una prueba con un líquido especial para ver si el VPH está presente. Si no es así, probablemente no haya que preocuparse.
Lesión escamosa intraepitelial. Estas células pueden ser precancerosas. Los médicos las denominan cambios de bajo o alto grado. Si son de bajo grado, una célula precancerosa puede no convertirse en cáncer durante muchos años. Si son de alto grado, las células podrían convertirse en cáncer mucho antes. Es probable que su médico le pida más pruebas, incluida una colposcopia, un instrumento que muestra los cambios en el cuello uterino y que puede conducir a una biopsia de tejido cervical para comprobar si hay células cancerosas.
Células glandulares atípicas. Estas células producen moco. Crecen en la abertura del cuello uterino y en el interior del útero. Si parecen anormales, el médico pedirá más pruebas, incluida una colposcopia, para saber con seguridad si se trata de un cáncer.
Cáncer de células escamosas o adenocarcinoma. Esto significa que las células del cuello uterino son tan anormales que el médico está casi seguro de que se trata de un cáncer.
Para estar seguro, su médico probablemente le pedirá otras dos pruebas: una colposcopia y una biopsia.
Durante la colposcopia, el médico le introducirá un espéculo en la vagina, al igual que hizo para la prueba de Papanicolaou. Esta vez, observará el cuello uterino con un colposcopio. Se trata de un instrumento con una lente y una luz brillante que permite al médico ver mejor el cuello del útero. Le limpiarán el cuello del útero con vinagre u otra solución líquida. Esto resaltará cualquier zona sospechosa. El médico podrá verlas a través de la lente del colposcopio.
Si el médico encuentra zonas que no parecen correctas, tomará una muestra, llamada biopsia. Enviará el tejido a un laboratorio para que lo analicen.