Constante y como un cuchillo. Ardor. Escozor. Dolor. Punzante. Así es como las mujeres con vulvodinia describen el dolor que sienten alrededor de la abertura de la vagina.
Hay dos tipos de vulvodinia. La vulvodinia generalizada significa que sientes dolor alrededor de la vagina. Si tienes vulvodinia localizada, sientes dolor en una zona específica. El dolor puede ser constante o producirse sólo cuando te sientas durante mucho tiempo o tienes relaciones sexuales.
Puede ser difícil hablar de ello con cualquier persona, incluido tu médico. Pero hablar de lo que te duele es el primer paso para ayudarte y curarte.
¿Qué lo provoca?
La vulvodinia es un trastorno de dolor. Los médicos no saben por qué se produce. No se produce por una enfermedad de transmisión sexual (ETS). Una infección, una enfermedad de la piel o un cáncer pueden causar dolor alrededor de la abertura de la vagina, pero ninguna de ellas es igual a la vulvodinia.
¿Quién está en riesgo?
La vulvodinia afecta a mujeres de todas las edades, razas y orígenes étnicos.
Otros factores son los cambios hormonales, los antecedentes de abuso sexual y los problemas de piel sensible, como las alergias.
Cuáles son las posibles complicaciones?
La vulvodinia puede ser tan dolorosa que se pierden las ganas de tener sexo. Esto puede causar problemas en las relaciones. Puede desencadenar una condición que los médicos llaman vaginismo. Es decir, los músculos que rodean la vagina se tensan porque temes que cualquier tipo de penetración te cause dolor. Muchas cosas, como el sexo, el uso de un tampón o un examen pélvico, pueden provocar esta reacción.
También puede afectar a tu imagen corporal y a tus patrones de sueño, lo que puede provocar ansiedad y depresión.