La cirugía de pérdida de peso salva la vida de algunas personas, quitándoles los kilos que han perjudicado su salud. Pero no es adecuada para todas las personas que tienen mucho peso que perder.
Si estás pensando en ello, habla con tu médico sobre los beneficios y los riesgos, y sobre si es una buena idea para ti.
Beneficios de la cirugía de pérdida de peso
La cirugía de pérdida de peso puede ayudarle a perder muchos kilos. Esa pérdida de peso suele conllevar otros beneficios para la salud.
Las afecciones médicas relacionadas con la obesidad suelen mejorar con esta pérdida de peso, a veces hasta el punto de que ya no se necesita la medicación, incluyendo:
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Diabetes de tipo 2
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Apnea obstructiva del sueño
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Hipertensión arterial
Después de la cirugía de pérdida de peso, la mayoría de las personas -alrededor del 95%- dicen que su calidad de vida es mejor. Algunos estudios también sugieren que las personas viven más tiempo después de la cirugía de pérdida de peso, en comparación con personas igualmente obesas que no se operan.
Riesgos de la cirugía de pérdida de peso
La cirugía de pérdida de peso conlleva riesgos reales. Hasta el 40% de las personas tienen complicaciones después. Estas complicaciones pueden producirse poco después de la cirugía o a largo plazo, y varían en función del tipo de cirugía de pérdida de peso que se realice.
Mientras que algunas complicaciones son desagradables o inconvenientes, otras pueden causar dolor y malestar o requerir cirugías adicionales, incluyendo:
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Complicaciones a corto plazo:
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Infecciones de la herida
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Sangrado excesivo
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Problemas respiratorios
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Complicaciones a largo plazo:
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Náuseas, vómitos y diarrea.
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Hernias abdominales
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Desnutrición
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También pueden producirse complicaciones graves. Éstas son raras, ya que ocurren en un 3% de las ocasiones. Algunas pueden poner en peligro la vida:
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Coágulo de sangre hacia los pulmones (embolia pulmonar).
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Fugas en las nuevas conexiones del intestino quirúrgico
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Úlceras sangrantes
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Ataques al corazón
El riesgo es mayor para las personas mayores de 60 años. Someterse a una cirugía de pérdida de peso en un centro con cirujanos muy experimentados reduce este riesgo.
Incluso después de una cirugía de pérdida de peso con éxito, son frecuentes otros problemas:
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Cálculos biliares, que a menudo requieren la extirpación de la vesícula biliar
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Deficiencias vitamínicas o desnutrición, por mala absorción de nutrientes
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Piel flácida, que requiere una cirugía de contorno corporal
