Una forma clave de manejar la colitis ulcerosa (CU) es establecer una sólida colaboración con su equipo médico. Se trata de una enfermedad larga y complicada. Sus síntomas se agudizarán y luego disminuirán. Querrá mantener a su médico al tanto para que le ayude a controlarla.
Diga las cosas como son
Una buena comunicación ayuda mucho. Así que sé abierto sobre tus síntomas y preocupaciones. No digas que estás "bien" o "OK" si no lo estás. Y si tienes brotes, coméntalo. Si mantienes a tu médico informado, es más probable que disfrutes de períodos más largos sin brotes.
Cuando se tiene CU, es posible que se necesite un medicamento que combata la inflamación del tracto digestivo y disminuya el sistema inmunitario, que es la defensa del cuerpo contra los gérmenes.
Cuando se producen brotes, es posible que su médico deba ajustar las dosis de su tratamiento. Tus síntomas pueden empeorar si no tomas tus medicamentos a tiempo o si dejas de tomarlos. Infórmele de todos los medicamentos que toma, incluidos los de venta libre, por si son desencadenantes de reagudizaciones.
Un problema como una infección también podría suponer un problema. Informe a su médico de cualquier cosa que ocurra con su salud, incluso si no parece estar relacionada con la CU.
Anótelo
Lleva un diario con toda la información relacionada con tu salud para poder llevarla a la próxima visita con tu médico. Querrán saber qué alimentos has estado comiendo, y cualquier desencadenante de brotes que hayas notado.
No sólo puede ayudarte a crear una lista de "come esto, no aquello", sino que también puede ayudar a tu médico a saber si estás recibiendo la nutrición que necesitas.
También ayuda a hacer un seguimiento de la frecuencia con la que vas al baño, la cantidad que sale y la cantidad de sangre que puedes estar perdiendo. Toma notas que puedas entender, como por ejemplo: "¿Son 100 chorros pequeños al día o 10 chorros de gran volumen?".
Observa el aspecto de la sangre. ¿Es acuosa o tiene coágulos? Anota lo que ves. También puedes preguntar a tu médico si tienes que llevar muestras de heces a tu revisión.
Su médico también querrá saber su peso. Si estás teniendo un brote o un ataque de diarrea, es posible que quieras pesarte más de una vez al día. Si notas un descenso en tu peso durante esos momentos, eso podría significar que estás deshidratado, lo cual es arriesgado para tu salud. Incluso cuando los síntomas estén controlados, es conveniente que vigiles tu peso en general, porque la CU dificulta la absorción de los nutrientes de los alimentos que comes.
Además, preste atención a su orina. ¿Es más oscura que antes? ¿O no orina tanto como normalmente? Estos son otros síntomas de deshidratación.
Asegúrate de hacer un seguimiento de tu salud en los días buenos y en los malos.
Considere la posibilidad de un ensayo clínico
Si quiere implicarse personalmente en la investigación de la CU, puede preguntar a su médico si hay ensayos clínicos que pueda considerar. Estos estudios prueban nuevos medicamentos para ver si son seguros y si funcionan. Suelen ser una forma de probar nuevos medicamentos que no están disponibles para todo el mundo. Su médico puede explicarle en qué consisten y si uno de estos ensayos puede ser adecuado para usted.