¡Enhorabuena! Ha decidido dejar de fumar, una de las mejores decisiones que puede tomar para su salud. Justo después de dar la última calada, su cuerpo empezará a recuperarse. Los niveles de monóxido de carbono en la sangre disminuirán. En menos de una semana, será más fácil respirar.
Dejar de fumar es difícil, por lo que querrá dar lo mejor de sí mismo para tener éxito. Dejar de fumar en seco, es decir, dejar de fumar sin ayuda, es un método muy popular. Pero no es fácil. Aproximadamente el 95% de los fumadores que lo intentan vuelven a fumar. Si usted es uno de ellos, existen herramientas que le ayudarán a alcanzar su objetivo.
Productos de sustitución de la nicotina
Rompen lentamente la adicción con dosis controladas de nicotina. Le permiten controlar sus ansias de fumar y le proporcionan cierto alivio de los síntomas de abstinencia.
Las dosis son cada vez más bajas a medida que las tomas, de modo que te acostumbras a menos nicotina antes de dejarla por completo. Si utiliza uno de estos productos, puede tener hasta un 70% más de posibilidades de dejar de fumar.
Si está embarazada o en período de lactancia, consulte a su médico antes de empezar.
Parches: Los parches se colocan directamente sobre la piel y liberan una pequeña cantidad de nicotina en el cuerpo. Se pueden adquirir sin receta médica, lo que significa que no es necesario tenerla.
Coloque un nuevo parche en un lugar diferente de su cuerpo cada día. Puede volver a utilizar un punto después de una semana. Puede ser más efectivo empezar a usar el parche unos días antes de la fecha de abandono y usarlo junto con otro producto de nicotina.
Goma de mascar: Este producto de venta libre se mastica como un chicle normal. Su dosis depende de la cantidad de tabaco que fume. Cuando sientas un cosquilleo en la boca, detente y ponlo en tu mejilla. Cuando el cosquilleo desaparezca, empieza a masticar de nuevo. Haga esto una y otra vez hasta que el cosquilleo desaparezca C normalmente después de unos 30 minutos. Durante las primeras 6 semanas, masticará un trozo cada 1 ó 2 horas. El tratamiento debería durar unas 12 semanas. Si sientes la necesidad de continuar, habla con tu médico.
Pastillas: Estas cápsulas de venta libre se toman después de las comidas. Se disuelven en la boca. La dosis depende de la cantidad que fume. El tratamiento debería durar 12 semanas.
Spray: Este producto suministra nicotina a través de la nariz o la boca. Algunos pueden comprarse sin receta, mientras que otros deben ser recetados por el médico. Al igual que otros productos de nicotina, debe utilizarlo durante 12 semanas.
Inhalador: Al igual que el tratamiento para el asma, se coloca este cartucho en la boca y se inhala una bocanada de nicotina. Sólo se puede utilizar con receta médica, y se debe usar durante unas 12 semanas.
Medicamentos con receta
Sólo puede obtener estos medicamentos con una receta de su médico. Deberás empezar a tomar cualquiera de los dos medicamentos antes de la fecha en la que dejes de fumar para darle tiempo a que se acumule en tu organismo.
La vareniclina (Chantix) es probablemente el primer medicamento que probarás si necesitas una receta. Actúa sobre la parte del cerebro que reacciona a la nicotina para que disfrutes menos del tabaco. También alivia los síntomas de abstinencia. La vareniclina se puede utilizar de forma segura con productos de nicotina, y un estudio demuestra que la combinación de ambos puede mejorar las posibilidades de dejar de fumar para siempre. Los efectos secundarios pueden ser náuseas, problemas para dormir, dolores de cabeza y vómitos.
El bupropión es un antidepresivo que reduce el deseo de fumar. Lo más probable es que te lo den si la vareniclina no funciona o si hay alguna razón por la que no puedas tomarlo. No lo tome con productos de nicotina a menos que su médico se lo indique. Los efectos secundarios más comunes son insomnio, pesadillas y sequedad de boca.
Otros métodos
Asesoramiento: Puede utilizarlo como método principal o como herramienta de apoyo. Se ha demostrado que las sesiones breves, incluso de tan sólo 3 minutos, ayudan. Los programas difieren, pero en general, te ayudan a elegir una fecha para dejar de fumar, te dan técnicas para hacer el cambio y te enseñan a manejar el proceso y a prevenir una recaída. Muchos hospitales y clínicas ofrecen sesiones individuales y de grupo con consejeros de forma gratuita o a bajo coste. Si no es una opción, todos los estados tienen una línea telefónica para dejar de fumar a la que puedes llamar.
Hipnosis: Un hipnoterapeuta entrenado le pondrá en estado de trance. A continuación, le hará sugerencias que le ayudarán a deshacerse de las ganas de fumar. Los médicos aún no saben la eficacia de este método o si funciona. Algunos estudios dicen que funciona mejor que el uso de productos de nicotina, mientras que otros afirman que no hay ningún beneficio.
Aplicaciones y grupos de apoyo en línea: Investiga y encuentra una que se ajuste a tus necesidades, para que sea más probable que sigas el programa.
Acupuntura: Esto puede funcionar si has tenido efectos secundarios con otros métodos para dejar de fumar. Un profesional cualificado utiliza finas agujas metálicas para estimular puntos de presión en el cuerpo. Los puntos de las orejas, en particular, parecen estimular las sustancias químicas del cerebro que ayudan a frenar el deseo de fumar. Los estudios no han confirmado que funcione para este fin. Necesitarás varias sesiones y deberás comprobar si tu seguro lo cubre, a menos que te parezca bien pagarlo de tu propio bolsillo.
Terapia láser: Funciona como la acupuntura, pero en lugar de agujas, utiliza láseres de baja intensidad que no dañan la piel. Los estudios no han confirmado que funcione.