Pies malolientes: consejos para prevenir el mal olor de pies

Si notas que tus pies huelen mal cuando te quitas los zapatos, no estás solo. Tener los pies apestosos es un problema muy común. Aprenda más sobre las causas del mal olor de pies y cómo puede ayudar a prevenirlo.

Causas del mal olor de pies

La principal causa de los pies malolientes es el sudor atrapado. Tus pies crean mucho sudor cada día ya que tienen miles de glándulas sudoríparas. Cuando el sudor queda atrapado en tus zapatos o calcetines, puede crear un mal olor. Esto se conoce como bromodosis o pies malolientes.

Las bacterias también son responsables del mal olor de los pies. Hay muchos tipos de bacterias en la planta de los pies. Estas bacterias viven del sudor que tus pies producen constantemente. Cuando se alimentan del sudor, las bacterias crean un ácido que provoca el olor de pies.

Además de las bacterias, los hongos también pueden provocar el mal olor de los pies. Los hongos crecen y prosperan en zonas cálidas y húmedas. Cuando los pies sudan dentro de los zapatos y los calcetines, se crea un entorno en el que pueden crecer los hongos. Estos hongos malolientes se conocen comúnmente como pie de atleta.

Algunos otros factores que podrían causar pies apestosos incluyen:

  • Mala higiene

  • Llevar el mismo calzado todos los días o no cambiarlo con la suficiente frecuencia

  • Ciertas enfermedades

Pies sudados

La bromodosis no sólo se produce cuando hace calor. Los pies sudan todos los días, sin importar la temperatura. Aunque cualquiera puede tener los pies apestosos, se calcula que entre el 10% y el 15% de las personas tienen los pies más olorosos que la media. Estas personas albergan en sus pies una bacteria llamada Kyetococcus sedentarius que crea compuestos sulfúricos. Estos compuestos pueden hacer que el sudor huela a huevo podrido.

Algunas personas son más propensas a tener los pies sudorosos. Por ejemplo, las mujeres y los adolescentes pueden sudar más debido a los cambios hormonales de su cuerpo. Las personas con hiperhidrosis también pueden tener los pies más sudorosos, ya que esta enfermedad provoca un exceso de sudoración. A su vez, el exceso de sudor puede hacer que los pies huelan mal.

También puedes notar que tus pies se vuelven más sudorosos y olorosos si:

  • Lleva un calzado demasiado pequeño o demasiado apretado

  • Permanecer de pie durante mucho tiempo

  • Están sometidos a una gran cantidad de estrés

Cómo tratar el olor de los pies

Los pies malolientes suelen ser fáciles de tratar en casa. Aquí hay algunas cosas que puede probar para reducir el sudor y el olor de los pies.

Poner los pies en remojo. Si el olor de tus pies es notable, puedes probar a ponerlos en remojo para darles una limpieza profunda. Para ello, mezcla media taza de sal de Epsom en agua caliente. Si no tienes sal de Epsom, puedes mezclar dos partes de agua tibia con una parte de vinagre blanco o de sidra de manzana.

Deja los pies en remojo hasta 20 minutos una vez a la semana. La sal de Epsom ayuda a eliminar la humedad de la piel, por lo que es menos probable que las bacterias se queden. El vinagre también ayuda a eliminar las bacterias de los pies. No debes poner los pies en remojo si tienes alguna herida o llaga abierta.

Mantén los pies secos. Las bacterias viven en zonas húmedas, por lo que mantener los pies secos ayudará a reducir el olor de los pies. Puedes aplicarte polvos de talco en los pies para absorber la humedad o el sudor. Si te sudan mucho los pies, puedes incluso probar a usar antitranspirante en la planta de los pies.

Cuando estés en casa, deja que tus pies tomen aire fresco quitándote los zapatos y los calcetines. Intenta llevar sandalias cuando puedas para reducir el sudor. Si tiene que usar zapatos cerrados, asegúrese de que le quedan bien. Si tus calcetines suelen sudar durante el día, lleva uno o dos pares más para poder cambiarlos cuando tus pies empiecen a oler.

Practica una buena higiene. Si tienes los pies apestosos, debes lavarte los pies todos los días. Puedes lavártelos mientras te duchas o puedes fregarlos en una bañera con agua tibia. Sécate bien los pies, incluso entre los dedos.

También debes mantener las uñas de los pies limpias y recortadas, y limar la piel muerta de los pies. Esto también puede ayudar a reducir los lugares donde les gusta vivir a las bacterias en los pies.

Cuida tu calzado. Debes evitar llevar los mismos zapatos dos días seguidos para que se aireen. Además, puedes lavar las plantillas de tus zapatos para que huelan mejor.

Otra forma de ayudar a reducir el mal olor de los pies es utilizar un spray desinfectante en tus zapatos y dejarlos secar al aire. Esto matará cualquier bacteria que viva en tus zapatos.

Hot