Puede picar, quemar, picar, pelar, agrietar y formar ampollas. Los hongos en los pies son asquerosos... Sigue leyendo para saber qué son y cómo prevenirlos.
¿Qué son los hongos en los pies?
Es una infección de la piel causada por gérmenes parecidos al moho que viven en las células muertas de la piel, el pelo y las uñas. Hay más de 80 tipos de hongos en tus pies. Eso es mucho más que en otras partes del cuerpo, incluso en las palmas de las manos. Pero aunque algunos de estos hongos tengan mala fama, puedes estar tranquilo. La mayoría no son perjudiciales.
El pie de atleta es el tipo más común de hongos en los pies. Hasta el 25% de las personas padecen esta infección, que pica e incluso duele, en algún momento. Suele crecer entre los dedos de los pies, pero puede extenderse a las plantas y a las uñas de los pies. Si te rascas el pie y luego te tocas otras partes del cuerpo, como las axilas o la ingle, también puede extenderse allí.
Dónde prosperan los hongos?
En lugares oscuros, cálidos y húmedos, como tus zapatos. Por eso les gustan tus pies. Cada pie tiene más de 250.000 glándulas sudoríparas. Para detener la propagación de los hongos en los pies, sécate los pies después de mojarlos. Deja que tus zapatos se aireen antes de volver a usarlos.
Cómo se propagan?
Los hongos entran en tu cuerpo a través de pequeñas grietas en la piel. Puedes contagiarte al tocar a alguien que los tiene. También puedes contraer hongos si tus pies descalzos entran en contacto con ellos. Esto puede ocurrir cuando caminas descalzo en zonas cálidas y húmedas, como un vestuario o una piscina pública.
Qué grado de contagio tiene?
No tanto como podrías pensar. A los hongos de los pies les encantan los lugares húmedos, pero puedes tener más posibilidades de contagiarte si no te lavas o secas bien los pies, o si no te cambias los calcetines y los zapatos con frecuencia.
Puedo contagiarme de alguien en mi casa?
Sí. Los hongos en los pies pueden permanecer en sábanas, toallas u objetos comunes. No comparta las toallas y mantenga las superficies limpias. Lávate los pies con agua y jabón al menos una vez al día y mantenlos secos.
Dónde puedo caminar descalzo?
En ningún sitio. Puedes reinfectarte caminando descalzo en casa -incluso en tu propia ducha y en tus propias alfombras-. Lleva siempre zapatos en los lugares públicos. Nunca se sabe qué gérmenes u hongos acechan allí. Si utilizas una piscina o una ducha pública, lleva sandalias o zapatillas de ducha.
¿Y la pedicura? ¿Son seguras?
Sí, pero ten cuidado. Nunca des por sentado que el spa limpia sus herramientas después de cada cliente. Lleve las suyas propias a su cita. Esa es la única manera de asegurarse de no contraer -o propagar- un molesto hongo en los pies en el salón de manicura.