Puede que estés dando un paseo por el parque con tus hijos. O quizás disfrutando de una tarde en el campo de golf. Sin embargo, esa diversión al aire libre tiene a veces un precio: una erupción de picor provocada por plagas que ni siquiera se ven.
Se trata de las niguas, unos bichos tan pequeños que necesitas una lupa para verlos. No son peligrosas, pero sus picaduras pueden dejarte con ganas de rascarte.
No dejes que te afecten. Aprende a calmar tu piel irritada y descubre cómo prevenir las picaduras la próxima vez que salgas a la calle.
Qué son las niguas y dónde acechan?
Los científicos llaman a estas criaturas "ácaros trombicúlidos". Pero tienen un montón de apodos. Puede que oigas que la gente los llama ácaros de la cosecha, chinches de la cosecha, piojos de la cosecha, ácaros de la segadora o chinches rojas.
Técnicamente, estos bichos no son insectos. Son "arácnidos", de la misma familia que las arañas y las garrapatas.
Puedes viajar por todo el mundo, pero no puedes escapar de estas plagas. Las niguas viven en todos los países. Sus lugares favoritos son las zonas húmedas y con hierba, como los campos, los bosques e incluso tu césped. También puedes encontrarlas cerca de lagos y arroyos.
Las niguas adultas no pican. Son las crías, llamadas larvas, las que hay que vigilar. Son rojas, anaranjadas, amarillas o de color paja y no miden más de 0,3 milímetros.
Después de salir de los huevos, las crías no vuelan y no se desplazan muy lejos por sí solas. Suelen permanecer agrupados en grandes grupos sobre las hojas y la hierba, normalmente a menos de 30 centímetros del suelo, y se adhieren a los animales o a las personas que pasan por allí.
En Estados Unidos, las picaduras de nigua son más frecuentes a finales de la primavera, en verano y a principios del otoño. Los bichos están activos cuando la temperatura del suelo está entre 77 y 86 grados F, y mueren cuando hace más frío de 42.
Qué se puede esperar de una picadura de nigua
Una vez que las niguas se enganchan a tus pantalones o camisa, se arrastran hasta encontrar un trozo de piel. Allí, utilizan unas garras afiladas como mandíbulas para hacer pequeños agujeros. A continuación, inyectan saliva que convierte algunas de tus células en papilla.
¿Por qué lo hacen? Para una nigua, esas células licuadas son alimento. Cuando se te pegan, pueden permanecer adheridas a tu piel durante varios días mientras comen.
Las picaduras de nigua pueden producirse en cualquier parte del cuerpo, pero suelen aparecer en grupos alrededor de la cintura o la parte inferior de las piernas. Puede que al principio no notes nada malo, pero en unas horas empezarás a sentir picor.
El picor suele durar varios días y a veces puede mantenerte despierto por la noche. También puedes notar que tu piel se enrojece y tiene bultos, ampollas o una erupción parecida a una colmena que puede tardar una o dos semanas en curarse.
Si eres varón y te pica una nigua en el pene, puedes padecer una enfermedad conocida como "síndrome del pene de verano". Provoca hinchazón, picor y problemas para orinar. Puede durar de unos días a unas semanas.
Las niguas no transmiten enfermedades... pero al rascarse pueden romper la piel y provocar una irritación o una infección.
Si has viajado al extranjero, ten en cuenta que la bacteria Orientia tsutsugamushi procedente de las picaduras de niguas infectadas (ácaros larvarios) puede causar tifus de los matorrales. La mayoría de los casos se registran por exposición a niguas en el sudeste asiático, Indonesia, China, Japón, India y el norte de Australia. Consulte a un médico si este es el caso.
Qué hacer si te pican
Si crees que has estado cerca de algunas niguas, revísate todo el cuerpo. Es posible que puedas ver pequeños puntos rojos, que se mueven muy rápido o que están pegados a tu piel.
Tu primer paso: Báñate o dúchate y restriega tu piel con agua y jabón. De este modo, se eliminan las niguas que aún quedan en la piel.
Utilizando agua caliente, lava tu ropa y cualquier manta o toalla que haya tocado el suelo para matar cualquier chinche que aún esté colgando.
A continuación, trata las picaduras con una crema o pomada antipicaduras de venta libre, como mentol, loción de calamina o hidrocortisona. También puedes aliviarte si tomas pastillas antihistamínicas o utilizas una compresa fría.
Las picaduras de nigua suelen mejorar por sí solas. Pero si las tuyas te siguen molestando después de unos días, acude al médico. En raras ocasiones, es posible que necesites inyecciones de esteroides para calmar el picor y la hinchazón. El médico también puede pedirte que tomes antibióticos si las picaduras se infectan.
Cómo prevenir las picaduras
Cuando pases tiempo al aire libre en zonas de hierba, utiliza un repelente de insectos que tenga DEET o ponte ropa tratada con un insecticida como la permetrina. Cuando te pongas el repelente de insectos, presta especial atención a las zonas donde las niguas podrían pasar de la ropa a la piel, como los puños, los escotes y los bordes superiores de los calcetines.
Algunos estudios demuestran que los sprays naturales pueden ayudar a mantener alejadas las niguas. Prueba los que tienen aceites de citronela, árbol de té, jojoba, eucalipto, geranio o hierba de limón.
Y, por supuesto, no te conviertas en un blanco fácil para una nigua hambrienta. Usa mangas largas y pantalones largos, con las perneras metidas dentro de calcetines largos.
Estos sencillos consejos reducen las probabilidades de sufrir picaduras de nigua. Así podrás disfrutar de la vida al aire libre... ¡sin picores!