El sexo anal es cualquier actividad sexual que implique el ano. No siempre significa la penetración con el pene. Se pueden utilizar juguetes sexuales, los dedos o la lengua. Las personas de todas las orientaciones sexuales e identidades de género pueden tener sexo anal.
Otros nombres para el sexo anal
La gente utiliza muchos términos diferentes para referirse al sexo anal, pero algunos comunes son:
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Anal
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Relaciones sexuales anales
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La sodomía
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Griego
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A pelo
Mitos y conceptos erróneos sobre el sexo anal
Mito: Sólo los hombres homosexuales tienen sexo anal.
Muchas parejas de hombres homosexuales tienen sexo anal, pero no todas lo hacen. Además, las personas de cualquier orientación sexual o género pueden disfrutarlo, incluidas las parejas heterosexuales.
Las personas sin pene pueden utilizar un juguete sexual para penetrar analmente a sus parejas. El pegging es un término que se utiliza cuando una mujer hace esto a un hombre.
Mito: No hay posibilidad de quedarse embarazada por el sexo anal.
Aunque las posibilidades de quedarse embarazada con el sexo anal son ciertamente menores que con el sexo vaginal, sigue existiendo una pequeña posibilidad. Cada vez que el pene está cerca de la vagina, siempre existe la posibilidad de que el semen entre en la vagina y provoque un embarazo...
Mito: Es más difícil contraer infecciones de transmisión sexual por el sexo anal.
Es igual de fácil, si no más, contraer infecciones de transmisión sexual (ITS) por el sexo anal. El tejido del ano es delicado y puede desgarrarse fácilmente. Esto puede dejar más huecos para que una infección entre en el cuerpo. La persona que recibe la penetración anal, a veces llamada el fondo, tiene más riesgo de contraer ITS que la persona que realiza la penetración, a veces llamada la parte superior.
Cómo explorar el sexo anal
Necesitas relajar el músculo del esfínter del ano, el músculo que aprietas cuando necesitas hacer caca pero tienes que esperar para recibir sexo anal. Por eso es importante que intentes mantenerte relajado mientras exploras el sexo anal solo o con tu pareja.
A diferencia de la vagina, el ano no se autolubrica. Tienes que usar mucha lubricación, ya sea con los dedos, con un juguete sexual o con el pene. Te ayudará a evitar desgarros u otras lesiones en la zona...
Las personas con pene suelen tener una glándula prostática. Esta glándula tiene muchas terminaciones nerviosas, lo que hace que la zona sea sensible. Dado que la próstata se encuentra al otro lado del recto, es posible estimularla introduciendo un dedo o un juguete sexual dentro del ano. Por este motivo, algunas personas con próstata encuentran el juego anal una actividad placentera.
El sexo anal puede ser ligeramente doloroso, o simplemente puede resultar extraño la primera vez que lo pruebes. Recuerda que siempre puedes parar cuando quieras y volver a intentarlo en otro momento. También puedes decidir que el sexo anal no es para ti?
Consejos de seguridad y consideraciones especiales
El sexo anal puede ser una actividad de mayor riesgo para el contagio de ITS. Para reducir el riesgo, utilice un preservativo cuando practique o reciba sexo anal con un pene. Para reducir el riesgo de contraer una ITS por el sexo oral en el ano, a veces llamado "rimming", utilice un protector dental. Se trata de una pieza plana de látex o poliuretano que se coloca entre la boca y el ano.
Una forma de reducir las posibilidades de contraer el VIH a través del sexo anal es tomar la profilaxis previa a la exposición (PrEP). Se trata de un medicamento recetado que, si se toma a diario, puede reducir el riesgo de contraer el VIH en un 99%.
Si por alguna razón acabas teniendo sexo anal sin protección, también puedes tomar la profilaxis postexposición (PEP) en las 72 horas siguientes a la actividad. Se trata de otro tipo de medicación que puede ayudar a prevenir el VIH después de haber mantenido relaciones sexuales. Sin embargo, a diferencia de la PrEP, que puede tomarse a diario para prevenir el VIH, ésta es sólo una medida de emergencia, y no debes utilizarla como forma principal de prevención del VIH.
Si tienes relaciones sexuales anales y vaginales, utiliza un preservativo nuevo cada vez que pases del ano a la vagina. Esto reducirá la posibilidad de que se produzcan infecciones como las del tracto urinario y la vaginosis bacteriana. Si utilizas dedos o juguetes sexuales para el juego anal, también es una buena idea limpiarlos antes de utilizarlos en la vagina.