Cómo entender la clamidia: lo básico
¿Qué es la clamidia?
La clamidia... es la enfermedad de transmisión sexual (ETS) bacteriana más común en EE.UU. Uno de cada cuatro estadounidenses la padece. Los científicos creen que es dos veces más común que la gonorrea y 30 veces más que la sífilis. Se puede contraer más de una vez.
La buena noticia es que la clamidia se cura fácilmente con antibióticos. La mala noticia es que la mayoría de las personas que contraen clamidia no presentan síntomas ni saben que la tienen. Sólo el 10% de los hombres y el 5%-30% de las mujeres que se someten a una prueba de laboratorio que confirma la enfermedad desarrollan síntomas. Alrededor del 30% de estas mujeres desarrollan complicaciones graves, como daños en las trompas de Falopio (los conductos que conectan los ovarios con el útero). Este daño está causado por la enfermedad inflamatoria pélvica y puede provocar infertilidad. Los daños en las trompas de Falopio también pueden aumentar el riesgo de embarazo ectópico (cuando el óvulo fecundado se implanta fuera del útero). La clamidia no tratada en el embarazo puede provocar un parto prematuro.
La infección puede transmitirse al feto y causar graves complicaciones. Los bebés nacidos de madres infectadas pueden sufrir neumonía o conjuntivitis, una inflamación de las membranas del ojo que puede provocar ceguera. Las mujeres embarazadas se someten a pruebas de detección porque es muy frecuente que no presenten síntomas, y las consecuencias para el feto/bebé pueden ser graves.
Los hombres con clamidia tienen menos probabilidades de presentar síntomas. Si los tienen, los síntomas más comunes son dolor al orinar y una secreción mucosa o acuosa. Los hombres pueden desarrollar una uretritis por clamidia (e infección del conducto que drena la orina de la vejiga) y síntomas de secreción del pene o ardor al orinar... Pueden desarrollar epididimitis u orquitis, una inflamación de los testículos que puede causar infertilidad.
¿Qué causa la clamidia?
La clamidia está causada por la bacteria Chlamydia trachomatis. La enfermedad se transmite por sexo oral, vaginal o anal.