No es frecuente, pero algunas personas con artritis reumatoide también desarrollan otras enfermedades autoinmunes. Entre ellas se encuentra la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), que se refiere a las condiciones que implican una inflamación intestinal a largo plazo. La enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa son las más comunes.
Tener AR no significa necesariamente que sea más probable contraer EII. Si ocurre, no está claro por qué. Algunos genes, como el HLA-DRB1 y el TYK2, desempeñan un papel en la artritis reumatoide y la enfermedad de Crohn. Las causas ambientales también pueden ser importantes.
La EII puede provocar hemorragias, pérdida de peso, calambres y diarrea. Aunque no se tenga, los problemas intestinales pueden ir unidos a la AR. Los problemas potenciales incluyen esofagitis, hemorragias y úlceras.
Puede reducir el riesgo de padecer estos problemas si habla con su médico sobre la posibilidad de reducir el consumo de antiinflamatorios no esteroideos (AINE) o de cambiar a otro tipo de medicamentos llamados inhibidores selectivos de la COX-2, no fumar y limitar el uso de glucocorticoides o corticosteroides.
Posibles causas
Muchas cosas pueden causar problemas en tu sistema gastrointestinal.
Algunos medicamentos: Los fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (DMARD), los corticosteroides y los AINE pueden causar efectos secundarios que repercuten en tu intestino y pueden ser molestos. Podrías tener dolor de estómago, náuseas y diarrea.
Los resultados de un estudio sugieren que las probabilidades de sufrir reflujo y dolor de estómago son mayores si se toman 12 miligramos de metotrexato (Otrexup, Rasuvo, Rheumatrex, Trexall) a la semana frente a 6 miligramos. Hable con su médico sobre la posibilidad de reducir su dosis, si la suya es alta y tiene estos problemas.
Infección: Tomar medicamentos antirreumáticos modificadores de la enfermedad hace más probable que puedas contraer cualquier tipo de infección bacteriana, incluidas las que dañan tu intestino. Esto se debe a que debilitan el sistema inmunitario, haciéndolo menos eficaz a la hora de protegerte contra las cosas que pueden hacerte enfermar.
Otra condición: La explicación podría ser simplemente un problema común como la enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE) u otro trastorno estomacal.
O puede tratarse de una enfermedad autoinmune que genere problemas intestinales.
Una afección más rara que puede desarrollarse es la vasculitis reumatoide, que se produce cuando la artritis reumatoide afecta a los vasos sanguíneos. Es una complicación de la enfermedad que puede producirse cuando se padece durante muchos años y es grave. La vasculitis reumatoide inflama y estrecha los vasos sanguíneos y puede afectar al tracto gastrointestinal.