Consejos para caminar con artritis reumatoide

Caminar es realmente como una medicina. Alivia el dolor de la artritis reumatoide y fortalece los músculos que sostienen las articulaciones. Puede mejorar tu estado de ánimo, ayudarte a dormir mejor y ponerte en forma para seguir haciendo las cosas que te gustan. Además, reduce la presión arterial y puede ayudarle a vivir más tiempo.

Utiliza estos consejos para que caminar sea más divertido y forme parte de tu rutina diaria.

Ve despacio.

Si no estás en forma y acabas de empezar, tómatelo con calma. Un paseo de 5 minutos por la mañana y otro por la noche puede ser todo lo que puedas hacer, y eso está bien. Al principio, camina por una superficie plana y evita las cuestas. A continuación, ve aumentando, añadiendo más minutos en cada sesión. Es muy importante que te pongas un ritmo cuando tengas AR. Si te excedes y pasas de no caminar a hacer caminatas de una hora, podrías tardar semanas en recuperarte.

Ten un buen par de zapatos.

Este es el único gasto crucial para caminar. Si tus zapatos están desgastados o se ajustan mal, caminar no se sentirá bien, y no querrás hacerlo más. Invierte en un par que ofrezca un soporte sólido. Los tacos gruesos pueden ayudarte a evitar las caídas. Mídase también los pies, porque su talla puede haber cambiado con los años. Reemplaza tus zapatos cada 500 millas.

Haz descansos.

Si hoy te propones caminar 30 minutos, no lo hagas de golpe. Descansa a lo largo del camino. Por ejemplo, camina en un parque o en el centro comercial donde sepas que hay muchos bancos. Siéntate unos minutos cuando lo necesites.

Pasea con un amigo.

Es más probable que disfrutes del ejercicio y lo cumplas si lo haces con otra persona. Busca un compañero de paseo y promete caminar con regularidad. Tu compañero puede ser tu pareja o un vecino - o incluso tu perro. Si sabes que otra persona o una mascota cuentan contigo, es más probable que te mantengas en el camino. Puede empujarte a salir y a moverte cuando de otro modo podrías quedarte en el sofá.

Planifica un tiempo.

Intenta caminar a la misma hora todos los días, quizá a la hora de comer o después del trabajo. Será más probable que lo cumpla.

Utiliza un podómetro.

Los contadores de pasos hacen que sea fácil marcar tu progreso. Ver cuántos pasos has dado hoy también puede inspirarte para dar más mañana. Camina más cada semana hasta alcanzar tu objetivo. Diez mil pasos es un buen objetivo. Date tiempo para alcanzarlo. Los nuevos dispositivos de ajuste portátiles no sólo registran los pasos, sino también las escaleras, las calorías quemadas y otros datos, y luego los suben a un sitio web. De este modo, es fácil ver tu progreso y compartirlo con tu médico si quieres.

Mira la televisión mientras caminas.

En casa o en el gimnasio, puedes caminar en una cinta mientras se emite tu programa favorito. Como incentivo, aparta algunos programas favoritos para verlos sólo cuando camines.

Camina donde quiera que estés.

Da pasos adicionales siempre que puedas. Sáltate el servicio de atención al cliente en el banco y entra andando. Cuando esperes a recoger a tus hijos después de una de sus actividades, sal del coche y camina unos minutos. Cada paso cuenta.

Hot