Por Stephanie Watson
Si tiene un cáncer de próstata en estadio avanzado (estadio III y IV), significa que la enfermedad se ha extendido fuera de la glándula prostática. Los médicos pueden tratar este tipo de cáncer, pero no pueden curarlo. Aun así, hay buenas opciones que pueden aliviar sus síntomas y ayudarle a llevar una vida larga y activa.
Hable con su médico sobre el tratamiento más adecuado para usted. Pregúntele sobre los tipos de efectos secundarios que podría tener. Querrá elegir el camino que le ofrezca los mejores resultados con los menores riesgos.
Sus principales opciones para tratar el cáncer de próstata avanzado son:
-
Radiación
-
Terapia hormonal
-
Cirugía
-
Espera vigilante o vigilancia activa
Radiación
La radioterapia utiliza rayos X de alta energía para eliminar las células cancerosas. Puede ayudar a reducir los tumores y aliviar el dolor de huesos y otros síntomas.
Los médicos pueden administrarle esta terapia de diferentes maneras:
Radioterapia de haz externo (EBRT)
enfoca los rayos X sobre su próstata desde una máquina situada fuera de su cuerpo. El médico dirigirá la radiación justo a la glándula y ajustará la dosis para dirigirse al cáncer sin dañar otras partes de su cuerpo. El tratamiento dura sólo unos minutos y no duele. Es probable que vaya a una clínica y lo reciba 5 días a la semana durante unas 7 a 9 semanas.
Braquiterapia
utiliza pequeñas bolitas, del tamaño de un grano de arroz, que emiten lentamente la radiación dentro de su próstata. Los médicos le darán un medicamento para dormirle o adormecerle el cuerpo, y luego le introducirán los gránulos a través de finas agujas.
Radio 223 (Xofigo)
mata las células cancerosas que se han extendido a los huesos. Utiliza un tipo de radiación que se adhiere a los minerales de los huesos. Su médico se lo inyectará en vena una vez al mes.
Su médico hará todo lo posible para no dañar otras partes de su cuerpo, pero algunos hombres tienen efectos secundarios de la radiación, como:
-
Diarrea, sangre en las heces y otros problemas intestinales.
-
Problemas para controlar la micción, o una vejiga permeable
-
Problemas de erección
-
Sensación de cansancio
Terapia hormonal
Las hormonas masculinas como la testosterona alimentan el crecimiento de las células del cáncer de próstata. El objetivo de la terapia hormonal es evitar que su cuerpo produzca estas sustancias y que las células tumorales las utilicen. Su médico puede llamarla terapia de privación de andrógenos.
Dependiendo del estadio de su enfermedad, puede recibir la terapia hormonal antes o después de la radiación.
Hay algunos tipos diferentes de medicamentos que podría tomar, entre ellos:
Agentes de GnRH.
Funcionan de diferentes maneras para evitar que su cuerpo produzca la hormona luteinizante (LH), que necesita para producir testosterona. Los medicamentos incluyen:
-
Buserelina (Suprefact)
-
Degarelix (Firmagon)
-
Goserelina (Zoladex)
-
Histrelina (Vantas)
-
Leuprolida (Eligard, Lupron Depot)
-
Triptorelina (Trelstar)
Antagonista del receptor de GnRH. Actualmente sólo existe uno, relugolix (Orgovyx), que se toma por vía oral. Actúa bloqueando la producción de hormonas por parte de la hipófisis, por lo que reduce la cantidad de testosterona que pueden producir los testículos.
Antiandrógenos.
Impiden que las células del cáncer de próstata utilicen cualquier hormona masculina, llamada andrógeno. Podría tomarlos junto con un agente GnRH. Los fármacos incluyen:
-
Bicalutamida (Casodex)
-
Flutamida (Eulexin)
-
Nilutamida (Nilandron)
Nuevos tipos de terapia hormonal
incluyen:
-
Acetato de abiraterona (Zytiga), que impide que las células del cáncer de próstata (y otras células) produzcan andrógenos. Su médico puede sugerirlo si ya ha probado otras terapias hormonales.
-
Enzalutamida (Xtandi), que bloquea el uso de andrógenos por parte de las células. Puede recibirlo si ha probado otras terapias hormonales y el fármaco de quimioterapia docetaxel.
La terapia hormonal puede causar efectos secundarios, tales como:
-
Bajo deseo sexual
-
Problemas de erección
-
Crecimiento y sensibilidad de los senos
-
Sofocos
-
Adelgazamiento de los huesos
Cirugía
Dependiendo de lo mucho que se haya extendido el cáncer, su médico podría extirparlo con una de las dos operaciones.
Prostatectomía radical.
Si su tumor no se ha extendido mucho más allá de la glándula prostática, su médico podría extirpar todo el órgano, además de parte del tejido que lo rodea. La forma más habitual de hacerlo es a través de un corte en el bajo vientre. Después de la operación, es posible que reciba radiación para eliminar las células cancerosas que hayan quedado.
Estará en el hospital unos días, pero normalmente podrá volver a sus actividades normales en 3 ó 5 semanas. Después, es posible que tenga problemas para controlar la orina, problemas para conseguir o mantener una erección y dificultad para dejar embarazada a una mujer.
Resección transuretral de la próstata (RTUP).
Esta cirugía no cura el cáncer, pero puede aliviar los síntomas, como los problemas para controlar la orina. El médico le introducirá en la próstata un instrumento llamado resectoscopio. Este instrumento suministra electricidad o calor que elimina una parte de la glándula. Se le administrarán medicamentos para dormirle o adormecerle durante la intervención.
Se recuperará en el hospital durante uno o dos días y, por lo general, podrá retomar sus actividades normales al cabo de un par de semanas. Es posible que después aparezca sangre en la orina y que corra el riesgo de sufrir una infección.
Espera vigilante o vigilancia activa
Los tratamientos para el cáncer de próstata pueden tener efectos secundarios. Si le preocupan estos riesgos, puede decidir posponer estos tratamientos y ver si su tumor crece. Esperar también es una opción si es mayor, su cáncer crece lentamente o no tiene síntomas que le molesten.
Esperar no significa no hacer nada con respecto a su cáncer. Su médico vigilará de cerca el tumor y estará atento a cualquier signo de empeoramiento.
Espera vigilante
significa que usted y su médico estarán atentos a los síntomas. El médico puede hacer pruebas de vez en cuando para asegurarse de que el cáncer no ha crecido.
Vigilancia activa
significa que su médico le hará pruebas, incluyendo análisis de sangre de PSA y exámenes rectales, normalmente cada 3-6 meses para comprobarlo. También es posible que le hagan una biopsia, en la que el médico extrae un pequeño trozo de tejido de la próstata y comprueba si hay cáncer.
Otras opciones
Si la radiación, la terapia hormonal o la cirugía no son adecuadas para usted, su médico podría sugerirle algunos otros tratamientos:
Quimioterapia.
Los fármacos matan las células cancerosas en todo el cuerpo. Podría recibir quimioterapia si la enfermedad se ha extendido fuera de la próstata y la terapia hormonal no está funcionando. También podría aliviar los síntomas.
Terapia con vacunas.
La mayoría de las vacunas ayudan a tu cuerpo a prevenir enfermedades, pero algunas también tratan afecciones como el cáncer. Sipuleucel-T (Provenge) extrae células de su sangre y las expone a una proteína de las células del cáncer de próstata en un laboratorio. A continuación, el médico inyecta las células de nuevo en el cuerpo para atacar el cáncer. Este tratamiento es para hombres con la enfermedad avanzada cuando la terapia hormonal ha dejado de funcionar.
Bifosfonatos.
Estos fármacos alivian el dolor del cáncer de próstata que se ha extendido a los huesos.
Ensayo clínico.
Los científicos siempre buscan nuevas formas de tratar el cáncer de próstata en ensayos clínicos. Estos ensayos prueban nuevos fármacos para ver si son seguros y si funcionan. A menudo son una forma de que la gente pruebe una nueva medicina que no está disponible para cualquiera. Su médico puede decirle si uno de estos ensayos puede ser adecuado para usted.