Durante el embarazo, el aumento de las hormonas ayuda al crecimiento de los bebés. Pero el exceso de hormonas también puede hacer que las glándulas sebáceas se disparen. Esto puede provocar acné y otros cambios en la piel, que en la mayoría de los casos desaparecen después del parto. Si el acné está estropeando tu brillo durante el embarazo, algunos cambios en la rutina pueden ayudarte.
Llama al médico si:
-
Un grano aparece infectado.
-
Quieres utilizar algún tratamiento para el acné. Los medicamentos como la isotretinoína (antes conocida como Accutane, ahora Absorica, Amnesteem, Claravis, Myorisan y Zenatane), los retinoides y las tetraciclinas son peligrosos de usar durante el embarazo y pueden causar defectos de nacimiento. Su médico puede sugerir cantidades muy pequeñas de crema con peróxido de benzoilo o lavado salicílico.
Cuidados paso a paso:
-
Utiliza un limpiador suave dos veces al día. Aclara con agua tibia (no caliente). No frote. Frotar irrita la piel.
-
Evita los limpiadores abrasivos que puedan irritar la piel.
-
No apriete ni pique los granos. Esto retrasa la curación y aumenta el riesgo de cicatrización.
-
Escoge maquillaje etiquetado como "libre de aceite" o "no comedogénico", que son menos propensos a irritar el acné.
-
Lávate con champú a diario si tienes el pelo graso. El pelo graso que toca la cara, el cuello o la espalda puede invitar a un brote de acné. Evita los productos grasos para el cuidado del cabello por la misma razón.
