Qué es el primer trimestre del embarazo?
El primer trimestre es la fase más temprana del embarazo. Comienza el primer día de la última menstruación -antes de que estés realmente embarazada- y dura hasta el final de la 13ª semana. Es una época de gran expectación y de rápidos cambios tanto para ti como para tu bebé. Saber lo que puedes esperar te ayudará a prepararte para los próximos meses.
Cambios en tu cuerpo durante el primer trimestre
El embarazo es diferente para cada mujer. Algunas mujeres brillan con buena salud durante esos primeros 3 meses; otras se sienten absolutamente miserables. Aquí tienes algunos de los cambios que puedes notar, lo que significan y qué señales justifican una llamada a tu médico.
Sangrado. Alrededor del 25% de las mujeres embarazadas presentan un ligero sangrado durante el primer trimestre. Al principio del embarazo, un ligero manchado puede ser señal de que el embrión fecundado se ha implantado en tu útero. Pero si tienes un sangrado intenso, calambres o un dolor agudo en el vientre, llama al médico. Podrían ser signos de un aborto espontáneo o de un embarazo ectópico (un embarazo en el que el embrión se implanta fuera del útero).
Sensibilidad en los pechos.Los pechos doloridos son uno de los primeros signos del embarazo. Están provocados por los cambios hormonales, que preparan los conductos de la leche para alimentar al bebé. Es probable que te duelan los pechos durante todo el primer trimestre. Aumentar una talla de sujetador (o más) y usar un sujetador de soporte puede hacer que te sientas más cómoda. Es probable que no vuelvas a tu talla habitual de sujetador hasta que tu bebé haya terminado de ser amamantado.
Estreñimiento. Durante el embarazo, los altos niveles de la hormona progesterona ralentizan las contracciones musculares que normalmente mueven los alimentos a través de tu sistema. Si a esto le añadimos el hierro adicional que te aportan las vitaminas prenatales, el resultado es un incómodo estreñimiento y gases que pueden hacer que te sientas hinchada durante todo el embarazo. Come más fibra y bebe más líquidos para que todo vaya mejor. La actividad física también puede ayudar.
Si el estreñimiento te molesta mucho, habla con tu médico sobre qué laxante suave o ablandador de heces es seguro usar durante el embarazo.
Secreción. Es normal ver una secreción blanca, fina y lechosa (llamada leucorrea) al principio del embarazo. Puedes usar un salvaslip si te hace sentir más cómoda, pero no uses un tampón porque podría introducir gérmenes en tu vagina. Si el flujo huele muy mal, si es verde o amarillo, o si hay mucho flujo claro, llama al médico.
Cansancio. Tu cuerpo está trabajando duro para mantener al bebé en crecimiento. Eso significa que te cansarás más fácilmente de lo habitual. Duerme siestas o descansa cuando lo necesites durante el día. Asegúrate de consumir suficiente hierro. Una cantidad insuficiente puede provocar anemia, lo que puede hacer que te sientas aún más cansada.
Gustos y disgustos alimentarios. Aunque no quieras un bol de helado de menta con pepinillos, como dice el viejo estereotipo, tus gustos pueden cambiar durante el embarazo. Más del 60% de las mujeres embarazadas tienen antojos de comida. Más de la mitad tienen antojos de alimentos que realmente no les gustan. Ceder a los antojos de vez en cuando está bien, siempre que comas alimentos sanos y bajos en calorías la mayor parte del tiempo. La excepción es la pica, es decir, el antojo de alimentos que no son de calidad, como la arcilla, la suciedad o el almidón de la ropa, que puede ser peligroso para ti y para tu bebé. Si experimentas este tipo de antojos, infórmale a tu médico de inmediato.
Orinar mucho. Tu bebé es todavía bastante pequeño, pero tu útero está creciendo y ejerce presión sobre tu vejiga. Como resultado, puedes sentir que tienes que ir al baño todo el tiempo. No dejes de beber líquidos -tu cuerpo los necesita-, pero reduce la cafeína (que estimula la vejiga), especialmente antes de acostarte. Cuando la naturaleza te llame, responde tan pronto como puedas. No te aguantes.
Acidez. Durante el embarazo, tu cuerpo produce más cantidad de la hormona progesterona. Ésta relaja los músculos lisos, como el anillo muscular de la parte inferior del esófago, el tubo que conecta la boca con el estómago. Estos músculos normalmente mantienen los alimentos y los ácidos en el estómago. Cuando se aflojan, puedes sufrir reflujo ácido, también conocido como ardor de estómago. Para evitar el ardor:
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Coma varias comidas pequeñas a lo largo del día.
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No te acuestes justo después de comer.
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Evita los alimentos grasos, picantes y ácidos (como los cítricos).
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Intenta elevar las almohadas cuando duermas.
Cambios de humor. El aumento de la fatiga y los cambios hormonales pueden ponerte en una montaña rusa emocional que te lleva de la alegría a la miseria, o de la esperanza al terror en cuestión de segundos. No pasa nada por llorar, pero si te sientes abrumada, intenta encontrar un oído comprensivo. Puedes hablar con tu pareja, un amigo, un familiar o incluso un profesional.
Náuseas matutinas.Las náuseas son uno de los síntomas más comunes del embarazo. Hasta el 85% de las mujeres embarazadas las padecen. Son el resultado de los cambios hormonales del cuerpo y pueden durar todo el primer trimestre. Para algunas mujeres embarazadas, las náuseas son leves. Otras no pueden empezar el día sin vomitar. Las náuseas suelen ser peores por la mañana (de ahí el nombre de "náuseas matutinas"). Para calmar las náuseas, prueba a comer bocadillos pequeños, insípidos o ricos en proteínas (galletas saladas, carne o queso) y a beber a sorbos agua, zumo de fruta claro (zumo de manzana) o ginger ale. Puede incluso hacer esto antes de levantarse de la cama. Evita cualquier alimento que te produzca náuseas. Las náuseas en sí mismas no son motivo de preocupación, pero si son graves o no desaparecen, pueden afectar a la cantidad de nutrientes que recibe tu bebé. Llama a tu médico si no puedes dejar de vomitar o no puedes retener ningún alimento.
Aumento de peso. El embarazo es uno de los pocos momentos en la vida de una mujer en que el aumento de peso se considera algo bueno, pero no te excedas. Durante el primer trimestre, debes aumentar entre 3 y 6 libras (tu médico puede sugerirte que ajustes tu aumento de peso hacia arriba o hacia abajo si empezaste tu embarazo con bajo peso o sobrepeso). Aunque lleves una persona más, en realidad no comes por dos. Sólo necesitas unas 150 calorías más al día durante el primer trimestre. Consigue esas calorías de forma saludable, añadiendo a tu dieta más frutas y verduras, leche, pan integral y carne magra.
El crecimiento de los bebés en el primer trimestre
Durante las primeras 13 semanas, tu bebé pasa de ser un óvulo fecundado a un feto completamente formado. Todos los órganos y sistemas principales están tomando forma. Eso significa que tu bebé podría resultar dañado si consumes drogas ilícitas, tienes una enfermedad o te expones a la radiación. Esto es lo que ocurre:
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El óvulo fecundado se convierte en un grupo de células que se dividen rápidamente y se implanta en tu útero. La placenta, el cordón umbilical y el saco amniótico comienzan a crecer.
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El sistema nervioso de tu bebé pasa de ser un tubo neural abierto a un cerebro y una médula espinal. Los nervios y los músculos empiezan a funcionar juntos. Tu bebé puede moverse por sí mismo, pero es demasiado pronto para que lo sientas.
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El corazón toma forma y comienza a latir. Puedes oírlo en la ecografía a partir de la sexta semana. Late entre 120 y 160 veces por minuto. Se forman los glóbulos rojos.
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Tu bebé desarrolla un sistema digestivo, que incluye intestinos y riñones.
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Tienen pulmones y otros órganos principales, pero no están completamente desarrollados.
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Empieza a crecer un esqueleto blando.
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Tu bebé empieza a parecer un bebé, con brazos, piernas, dedos de las manos y de los pies. Su cara tiene ojos, orejas, nariz y boca. Le crece la lengua y las yemas de los dientes. Los párpados cubren los ojos de tu bebé y, al final del trimestre, incluso tiene uñas.
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Los genitales empiezan a crecer, pero es demasiado pronto para saber por ecografía si vas a tener una niña o un niño.
Al final del primer trimestre, tu bebé medirá unos 5 cm.
Tareas del primer trimestre
Tener un bebé es uno de los momentos más alegres en la vida de muchas mujeres. Desde pensar en el día en que traerás a tu pequeño a casa, hasta elegir el nombre y los colores de la habitación del bebé, la emoción es intensa. Pero también hay que tomar algunas medidas prácticas durante el primer trimestre, entre ellas:
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Elige un médico. Quieres un obstetra o una comadrona? Pide referencias y averigua qué cubre tu seguro médico.
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Programa una visita prenatal en cuanto sepas que estás embarazada. En la primera cita se tratarán muchas cosas. El médico te hará una historia clínica completa y hablará contigo sobre tu estilo de vida y tus hábitos de salud. Determinará la fecha del parto. También te harán análisis de sangre y orina y posiblemente un examen pélvico.
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Continúe con las visitas prenatales cada 4 semanas. El médico comprobará tu peso y tu presión arterial, analizará tu orina y escuchará los latidos de tu bebé.
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Conozca qué otras pruebas y exámenes puede necesitar, como las pruebas para buscar problemas genéticos en su bebé.
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Empieza a tomar una vitamina prenatal con al menos 400 microgramos de ácido fólico para ayudar a que el cerebro y la médula espinal de tu bebé crezcan adecuadamente.
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Pregunte a su médico qué medicamentos de prescripción y de venta libre puede seguir tomando con seguridad.
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Revisa tu dieta y haz los cambios que necesites para asegurarte de que tú y tu bebé recibís la nutrición adecuada. Bebe mucha agua.
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Abandona los malos hábitos, como el tabaquismo y el consumo de drogas ilegales. Deja el alcohol y reduce la cafeína.
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Mantén tu rutina de ejercicios, pero escucha a tu cuerpo. Es posible que tengas que cambiar el tipo de ejercicio que haces, o aflojar un poco.
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Investiga lo que cuesta tener un bebé y empieza a hacer cambios. Tendrás que pagar la guardería? Reducirás el trabajo? Elabora un nuevo presupuesto que refleje la nueva incorporación.
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Decide cuándo y cómo compartirás la noticia. Tal vez quieras esperar a oír el latido del corazón del bebé o a superar el primer trimestre. También es conveniente que te informes sobre la política de tu empresa en materia de baja por maternidad y conozcas tus derechos antes de comunicárselo a tu jefe.
Síntomas de emergencia durante el primer trimestre
Cualquiera de estos síntomas puede ser una señal de que algo va muy mal en tu embarazo. No esperes a tu visita prenatal para hablar de ello. Llame a su médico de inmediato si experimenta:
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Dolor abdominal intenso
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Sangrado abundante
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Mareos severos
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Aumento rápido de peso o muy poco aumento de peso
