Infórmese con el médico sobre las afecciones bucales -dientes flojos, mal aliento, llagas en la boca- que podrían indicar un grave problema de salud subyacente.
Cuando cuides tus dientes y encías en casa, también es importante que estés atento a nuevos problemas en tu boca. Pueden ser señales de advertencia de afecciones más graves en el organismo. Los síntomas a los que hay que prestar atención son:
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Dolor en las encías, los dientes o la mandíbula
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Sangrado de las encías
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Dientes sueltos o perdidos
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Mal aliento recurrente
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Llagas, manchas irregulares o bultos en la boca
Si notas alguno de estos signos, acude a tu dentista de inmediato. Tu dentista puede diagnosticar los problemas dentales específicos que puedan estar desarrollándose. O puede remitirte a otro profesional de la salud para que te haga una evaluación y un tratamiento adicionales.
Dolor de boca y mandíbula
Junto con síntomas como el herpes labial, el dolor de boca y mandíbula suelen ser signos de estrés. El estrés puede contribuir a una serie de trastornos físicos y mentales. Y su dentista puede ayudarle a identificar el origen de las molestias en la mandíbula, que a menudo están causadas por afecciones sencillas y tratables, como un dolor de muelas, problemas de sinusitis o enfermedades de las encías.
También es importante saber que el dolor o las molestias en la mandíbula pueden significar que se está sufriendo un ataque al corazón. Saber esto, y reconocer otros síntomas comunes de ataque al corazón, podría ayudar a salvar su vida o la de un ser querido.
Sangrado y dolor de encías
Las encías que duelen o sangran pueden ser el resultado de una enfermedad de las encías que está empeorando. La enfermedad de las encías suele ser más grave en personas con enfermedades subyacentes como la diabetes, que reduce la resistencia del cuerpo a las infecciones. Esto hace que las encías corran el riesgo de inflamarse debido a las bacterias que viven en la placa. Otros signos orales de la diabetes son:
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Boca seca
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Aliento con olor a fruta
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Infecciones orales por hongos
Dientes sueltos o perdidos
Los dientes que se mueven o se caen inesperadamente son un signo de enfermedad de las encías avanzada. La pérdida de dientes también puede ser uno de los primeros signos de osteoporosis, que disminuye la densidad ósea y debilita los huesos.
Algunos estudios muestran una relación entre la osteoporosis y la pérdida de hueso en la mandíbula, que ancla los dientes. Especialmente común en las personas mayores, la pérdida de dientes puede producirse cuando la osteoporosis afecta a la mandíbula. La pérdida de dientes afecta aproximadamente a un tercio de los adultos de 65 años o más.
La osteoporosis, que afecta a casi 10 millones de estadounidenses, no suele diagnosticarse hasta que se fractura o rompe un hueso. Las mujeres con osteoporosis tienen tres veces más probabilidades de sufrir la pérdida de dientes que las que no padecen la enfermedad. Acudiendo a su dentista con regularidad, siguiendo una dieta equilibrada y realizando actividad física con regularidad, puede adelantarse a ser diagnosticado y tratado antes de que se produzcan lesiones graves.
Cambios en la superficie de los dientes y en el esmalte
La erosión y el esmalte dental translúcido suelen ser signos de un trastorno alimentario o de un problema de reflujo ácido. Los vómitos excesivos, como los que se observan en la bulimia, pueden provocar otros problemas de salud bucal como:
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Boca seca
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Labios secos y agrietados
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Pérdida del esmalte de los dientes
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Dientes sensibles
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Glándulas salivales inflamadas
Mal aliento (halitosis)
El mal aliento puede ser el resultado de una boca seca o de los alimentos y bebidas que se consumen. Pero la enfermedad de las encías y la gingivitis también pueden contribuir a la molesta recurrencia del mal aliento.
Más allá de los dientes y las encías, el mal aliento que persiste puede ser el resultado de ciertos problemas de salud subyacentes que requieren atención médica inmediata. Estas condiciones incluyen:
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Infecciones de los senos paranasales
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Infección pulmonar crónica
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Enfermedad hepática o renal
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Problemas gastrointestinales
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Diabetes
Llagas, parches o bultos en la boca
Las llagas y las manchas inusuales en la boca pueden ser señal de algo benigno como una afta blanca o amarillenta. Pero sin ver a un dentista no hay forma de estar seguro. Haz que tu dentista revise de inmediato cualquier lesión, mancha o bulto nuevo. Pueden ser el resultado de una infección oral por hongos o algo más grave.
El cáncer oral es una de las formas más comunes de cáncer en los Estados Unidos. Suele empezar como una pequeña mancha o llaga blanca o roja en la boca y se da con más frecuencia en fumadores o personas que consumen cualquier otra forma de tabaco o alcohol. Los signos de que puede tener cáncer oral incluyen:
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Llagas sangrantes que no se curan fácilmente
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Puntos duros o zonas ásperas
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Tejido descolorido
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Cambios en la forma de encajar los dientes
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Entumecimiento
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Bultos o tejido irregular en la boca, mejillas, cuello o cabeza
El cáncer oral no es algo que deba intentar diagnosticar en casa. Si observa alguno de estos signos en su boca, asegúrese de acudir a su dentista, que puede remitirle a los especialistas adecuados para que le atiendan, si es necesario.
