El sarro (cálculo dental): 6 consejos para eliminar la acumulación de sarro

Cuando la placa se acumula en los dientes, se endurece y se convierte en sarro, también llamado cálculo dental, en los dientes, lo que puede provocar una grave enfermedad de las encías. El médico ofrece 6 consejos para mantener el sarro y el cálculo a raya.

¿Pero sabes por qué? ¿Qué es el sarro? ¿Cómo llega a los dientes? ¿Y qué puede ocurrir si lo hace? Infórmate bien a continuación.

¿Qué es el sarro?

Aunque te cuides mucho los dientes en casa, sigues teniendo bacterias en la boca. Se mezclan con proteínas y subproductos de la comida para formar una película pegajosa llamada placa dental. Esta mugre recubre los dientes, se mete bajo la línea de las encías y se pega a los empastes u otros trabajos dentales. La placa contiene bacterias que pueden dañar el esmalte de los dientes y provocar caries. Pero si eliminas la placa con regularidad, puedes prevenir las caries permanentes y las enfermedades de las encías.

Sin embargo, los problemas son mayores si la placa se queda en los dientes y se convierte en sarro.

El sarro, también llamado cálculo, se forma por debajo y por encima de la línea de las encías. Es áspero y poroso y puede provocar la retracción de las encías y la enfermedad de las mismas. Debe eliminarse con herramientas especiales en la consulta del dentista.

Cómo afecta el sarro a los dientes y las encías?

El sarro puede dificultar el cepillado y el uso del hilo dental como debería. Esto puede conducir a caries y al deterioro de los dientes.

Cualquier sarro que se forme por encima de la línea de las encías podría ser malo para ti. Esto se debe a que las bacterias que contiene pueden irritar y dañar las encías. Con el tiempo, esto podría conducir a una enfermedad progresiva de las encías.

La forma más leve de enfermedad de las encías se llama gingivitis. Por lo general, puede detenerse y revertirse si te cepillas, usas el hilo dental, un enjuague bucal antiséptico y te sometes a limpiezas periódicas con tu dentista.

Si no, puede empeorar, hasta el punto de que se formen bolsas entre las encías y los dientes y se infecten con bacterias. Eso se llama periodontitis. Tu sistema inmunitario envía sustancias químicas para defenderse y éstas se mezclan con las bacterias y lo que éstas desprenden. El guiso resultante puede dañar los huesos y los tejidos que mantienen los dientes en su sitio. Además, algunos estudios relacionan las bacterias de la enfermedad de las encías con las enfermedades del corazón y otros problemas de salud.

Consejos para ayudar a controlar el sarro

Tu mejor opción es no dejar que se forme el sarro en tus dientes. He aquí cómo:

  • Cepíllate regularmente, dos veces al día durante 2 minutos cada vez. Un cepillado de 30 segundos dos veces al día no elimina la placa ni previene el sarro. Utiliza un cepillo con cerdas suaves que sea lo suficientemente pequeño para que quepa en tu boca. Asegúrate de incluir las superficies difíciles de alcanzar detrás de los dientes y en los molares posteriores.

  • Los estudios han descubierto que los cepillos de dientes electrónicos, o con motor, pueden eliminar la placa mejor que los modelos manuales. Independientemente del tipo que utilices, asegúrate de que tiene el sello de aprobación de la Asociación Dental Americana (ADA). Estos han sido sometidos a rigurosos controles de calidad y pruebas de seguridad.

  • Elige una pasta de dientes con flúor para controlar el sarro. El flúor ayudará a reparar el daño del esmalte. Algunos productos tienen una sustancia llamada triclosán que combate las bacterias de la placa.

  • Usa el hilo dental, el hilo dental, el hilo dental. No importa lo bueno que seas con el cepillo de dientes, el hilo dental es la única manera de eliminar la placa entre los dientes y mantener el sarro fuera de estas zonas de difícil acceso.

  • Enjuágate a diario. Utilice un enjuague bucal antiséptico a diario para ayudar a eliminar las bacterias que causan la placa.

  • Vigila tu dieta. Las bacterias de tu boca prosperan con los alimentos azucarados y con almidón. Cuando se exponen a esos alimentos, liberan ácidos perjudiciales. Intenta seguir una dieta sana y limitar la cantidad de alimentos azucarados que consumes. Esto también se aplica a los tentempiés. Cada vez que comes, también alimentas a las bacterias de tu boca. No es necesario que renuncies a los dulces o a los tentempiés entre horas. Sólo tienes que ser consciente de la frecuencia con la que te das un capricho. Cepíllate y bebe mucha agua durante y después de las comidas.

  • No fume. Los estudios demuestran que las personas que fuman cigarrillos o consumen otros productos del tabaco son más propensas a tener sarro.

Una vez que se ha formado el sarro, sólo un profesional de la odontología podrá eliminarlo de tus dientes. Por lo tanto, visita a tu dentista cada 6 meses para eliminar la placa y el sarro que se haya podido formar y para prevenir problemas posteriores.

Hot