Formas de ayudar a su hijo con TDAH a tener éxito en la escuela

La escuela puede ser especialmente difícil para los niños con TDAH. Hay formas de ayudar a que las cosas sean un poco más fáciles para el niño en su vida. Infórmate con el médico.

Estas cosas pueden hacer que la escuela sea especialmente difícil. Pero hay formas de ayudar a tu hijo a pasarlo mejor en clase.

Edúcate a ti mismo

Es útil estar familiarizado con las leyes, los reglamentos y las políticas vigentes para apoyar a su hijo:

Los derechos de su hijo. Existen dos leyes federales para garantizar que los niños con discapacidades reciban una educación gratuita y apropiada. La Ley de Educación para Personas con Discapacidades (IDEA) y el artículo 504 de la Ley de Rehabilitación de 1973 exigen que las escuelas ofrezcan servicios y otras cosas para ayudar a los niños a aprender.

Es posible que tu estado tenga también otras leyes al respecto.

Programa Educativo Individualizado (IEP). Si tu hijo necesita expectativas diferentes sobre lo que aprende, o formas diferentes de aprenderlo, debe tener un IEP. En él:

  • Detallar esas necesidades

  • Explicar los servicios que la escuela les dará

  • Señalar cómo se medirá su progreso

Plan 504. Si su hijo no necesita un IEP y estará en clase con otros estudiantes de su nivel de grado, este documento describe otras formas en que la escuela lo apoyará. Los planes se adaptan a las necesidades de cada niño. No cambian lo que se enseña en clase. Pero su hijo puede:

  • Obtener tiempo extra en los exámenes y trabajos escolares

  • Tener la opción de escuchar audiolibros en lugar de leer

  • Dar respuestas verbales a un examen en vez de escritas

  • Hacer los exámenes en una sala diferente con menos distracciones o en un grupo más reducido de estudiantes

  • Recibir terapia del habla, terapia ocupacional o asesoramiento

La ley no establece una forma estándar de obtener un plan 504. Depende de cada colegio. Si crees que un plan podría ayudar a tu hijo, ponte en contacto con el distrito escolar y averigua qué implica.

Las políticas y el apoyo disponibles en la escuela de su hijo. Solicite por escrito al director de su hijo una evaluación de los servicios. En su página web, una organización llamada Children and Adults with Attention Deficit Hyperactivity Disorder (CHADD) ofrece un ejemplo de carta que podrías enviar.

Muchos colegios públicos también ofrecen grupos de habilidades sociales. Se trata de pequeñas reuniones -normalmente entre dos y ocho niños- dirigidas por un psicólogo escolar o un logopeda. Pueden ayudar a los niños a aprender a relacionarse con sus compañeros y a manejar ciertas situaciones sociales.

Cómo empezar en un nuevo colegio

Su hijo va a empezar la secundaria o el bachillerato? Se ha mudado durante el verano? Un cambio tan grande puede ser difícil para un niño o adolescente con TDAH.

Facilite la tarea poniéndose en contacto con la escuela antes de que empiecen las clases. Ayude a la nueva escuela a asignar a su hijo las clases y los profesores que se ajusten a sus capacidades y estilo de aprendizaje.

Llame a la escuela y acuerde compartir los boletines de notas, los resultados de los exámenes y las notas del año pasado. Reúnete con el orientador y los profesores de tu hijo. Es posible que tengas que actualizar su Plan 504 o su IEP, o hacer uno nuevo.

Pídale al orientador que le lleve a usted y a su hijo a visitar el nuevo colegio. Reúnase con los profesores, el director, la enfermera y cualquier otra persona que su hijo vaya a ver a diario. Recorra con su hijo toda la jornada escolar para que sepa dónde tiene que ir y cuándo. Si es posible, intente concertar una cita para jugar o salir con otro alumno de su nueva clase.

La planificación y la práctica por adelantado, junto con las rutinas familiares en casa, os ayudarán a ambos a acostumbraros a este cambio y quizás a sentiros más seguros el primer día de clase.

Habla con los profesores

Reúnete para hablar de las necesidades y objetivos de tu hijo, y ver qué pueden hacer para ayudarles en clase. Esto podría incluir dejarles sentarse en la primera fila y lejos de puertas y ventanas. Eso puede ayudarles a evitar las distracciones y a mantenerse concentrados. El profesor también puede ver mejor si necesitan un poco de ayuda. Pide acceso al horario. Tal vez quieras conseguir un segundo juego de libros para tenerlo en casa también. Además, discute sobre los métodos de enseñanza variados que pueden mantener a tu hijo interesado.

Trabajar en equipo ayuda. Demuestra a tu hijo que los adultos más importantes de su vida le cubren las espaldas. He aquí cómo crear un equipo ganador de padres y profesores:

Hablen cara a cara. Concierte reuniones a principios del curso escolar para hablar de cómo afecta el TDAH a su hijo. Es diferente para cada persona, y la situación de su hijo es única. Mantén una actitud positiva. En lugar de hablar de sus problemas, céntrate en lo que les ayuda. Evite decir: "Nunca me escucha". Sustitúyalo por algo como: "Me parece que Johnny presta más atención cuando estamos en un espacio tranquilo y me mira a los ojos".

Si tienes informes o planes educativos, comparte copias con los profesores.

Mantén el contacto. Compruebe regularmente en persona, por correo electrónico o por teléfono, y pregunte por el comportamiento de su hijo y por cómo le van las tareas escolares. Averigüe cuántos deberes tiene previsto asignar el profesor cada noche. Puede pedirle ayuda extra para asegurarse de que su hijo pueda terminar todas sus tareas, o tiempo extra en los exámenes.

Consulta las páginas web de los profesores para conocer los próximos exámenes o grandes proyectos. Pida consejo a los profesores sobre la mejor manera de ayudar a su hijo a organizarse y prepararse con suficiente antelación a las fechas de entrega. Esto puede evitar una crisis de última hora para usted y su hijo.

Tengan tacto. Elige bien tus palabras para no poner al profesor a la defensiva.

En lugar de: ¿Por qué no ayudas a Johnny a terminar sus tareas en la escuela?

Prueba con esto: Me preocupa que Juanito tenga que terminar las tareas de clase en casa. ¿Hay algo que podamos hacer para ayudarle a trabajar más rápido en la escuela?"

No se tome las cosas como algo personal. Puede que te llamen diciendo que tu hijo interrumpe la clase o no presta atención. No arremeta contra el mensajero. En lugar de eso, diga que sabe que su hijo es a menudo un poco pesado, y hable de las soluciones a los problemas. Cosas sencillas como cambiarle de sitio o darle instrucciones de una en una pueden ayudar.

Mantenga a los profesores informados. Si empiezas o cambias la medicación para el TDAH, díselo a los profesores y administradores. Ellos pueden vigilar los efectos secundarios y hacerte saber si la medicación parece estar ayudando. Además, infórmeles si hay un cambio importante en casa, como un divorcio o una muerte, ya que este tipo de cosas pueden afectar al comportamiento de cualquier niño.

Establezca objetivos comunes. Muchos de los síntomas del TDAH afectan a su hijo dentro y fuera de la escuela. Si el seguimiento de las instrucciones es un problema, piense con el profesor en formas de ayudarle a mantenerse en el camino que pueda utilizar tanto en casa como en el aula. El uso de las mismas herramientas crea un vínculo entre la escuela y el hogar.

Sé organizado en las reuniones. Las reuniones de padres y profesores suelen ser breves, así que acude con una lista de preguntas para que no se te olvide preguntar algo importante. Organiza los boletines de notas, los resultados de los exámenes y los apuntes del profesor en una carpeta para tenerlos al alcance de la mano.

Colabora. Asiste a la noche de vuelta al cole y ofrécete como acompañante en una excursión o ayuda en la biblioteca. Así demostrará al profesor y a su hijo que está conectado con la escuela. Y podrá ver de primera mano cómo se relaciona su hijo allí.

Dé las gracias. Cuando un profesor se esfuerza por comprender y ayudar a su hijo, escríbale una sencilla nota de agradecimiento.

También es una buena idea que su hijo tenga un horario para el día y un plan de comportamiento escrito -que fomente las acciones positivas- colgado en una pared cercana o en su escritorio.

En casa

Una buena forma de apoyar a tu hijo es crear una rutina para cuando esté en casa:

Facilite la incorporación de un nuevo horario. Si su hijo ha dormido hasta tarde durante las vacaciones de verano, empiece a despertarle un poco antes cada día. Así no estará aturdido cuando empiece el colegio. Acuéstese también un poco antes cada noche para que duerma lo suficiente.

Vuelve a darles los medicamentos para el TDAH si te has tomado un descanso durante el verano.

Establece una rutina. Pon una lista de las actividades diarias de la mañana en la nevera o en algún lugar donde tu hijo la vea. Anote todo lo que tiene que hacer antes de salir por la puerta, incluyendo:

  • Vestirse.

  • Haz la cama.

  • Tomar el desayuno.

  • Empaquetar los deberes.

  • Lleva la mochila, los zapatos, la chaqueta y el almuerzo.

Más información: Ejemplos de horarios matutinos y nocturnos para su hijo con TDAH.

Organícese. Ayude a su hijo a estar al tanto de los deberes. Entre las grandes herramientas para organizarse están:

  • Un calendario o planificador diario

  • Un tablón de anuncios o de borrado en seco para colocar las fechas de entrega y los recordatorios

  • Un organizador de escritorio y cubos de almacenamiento para el material escolar para mantener su espacio de estudio ordenado y libre de distracciones

  • Carpetas codificadas por colores o una carpeta con varios bolsillos para mantener las tareas ordenadas

Deja que te ayuden a hacer la lista de la compra de material para el año que viene... Leer más: Tu guía para resolver la desorganización en la escuela.

Prepara un puesto de deberes. Elige un lugar en el que tu hijo pueda hacer los deberes todos los días. Asegúrate de que esté alejado de distracciones como hermanos ruidosos o la televisión. (La mesa de la cocina funciona bien para algunos niños, ya que puedes comprobar fácilmente cómo están).

El asiento debe estar orientado hacia una pared, no hacia una ventana. El ruido blanco, procedente de un reproductor de MP3 o un ventilador, puede ayudar a ahogar los sonidos para mantener su mente en el trabajo.

Intenta que los hermanos tengan su propio espacio, aunque esto puede ser difícil si tienes que vigilar a más de uno. Recuerda que cada niño puede tener necesidades diferentes.

Haz que hagan los deberes lo más cerca posible de la misma hora todos los días. Deja que se tomen un descanso cada 10 ó 20 minutos para que puedan moverse. Asegúrate de que estos descansos no incluyan pantallas como las de la televisión o el teléfono. Haz que aborden tres sesiones de 20 minutos con un tiempo de juego o una merienda en medio. O cambia de asignatura: matemáticas durante 20 minutos, inglés durante otros 20 y luego de nuevo matemáticas. Se esforzarán menos y su trabajo puede mejorar.

Haz un calendario para llevar un control de las tareas y actividades. Establece una forma de que sepan qué tareas son las más importantes. Por ejemplo, puedes poner un código de colores para mostrar las prioridades. Incluye cosas como los clubes extraescolares, los deportes, las clases de música y las citas regulares para jugar. Añade proyectos especiales y exámenes a medida que vayan surgiendo. Deja espacio en cada día para los deberes, además de algo de tiempo para relajarse y divertirse.

Deja que te ayuden a diseñar el horario para que tengan una sensación de control y propiedad. Repasa el horario cada día hasta que entienda la rutina. Tu hijo puede incluso utilizar una aplicación para organizar las tareas y gestionar el tiempo.

Es probable que su hijo se concentre mejor en la escuela y en casa si tiene momentos -antes y después de la escuela- en los que puede estar activo. Esto también puede ayudarles a dormir mejor, lo que puede ayudar a la concentración y al comportamiento.

Planificar el estudio en función de la medicación. Un niño que toma la medicación para el TDAH puede estudiar mejor a primera hora de la tarde, cuando los fármacos todavía hacen efecto. En cambio, puede tener dificultades al final de la tarde, cuando se le pasa el efecto.

Motivar con recompensas. No son sobornos. Está bien premiar a tu hijo cuando hace un buen trabajo. Un poco de estímulo puede llegar muy lejos. Algunos padres establecen una moneda -fichas de póquer, por ejemplo- a cambio de hacer los deberes. Su hijo puede entregar las fichas más tarde para obtener las recompensas que desee, como tiempo para ver la televisión o jugar a un videojuego.

Asegúrese de que los deberes se entregan. Tu hijo puede pasarse horas haciendo los deberes y luego perderlos u olvidarse de entregarlos. Un sistema de carpetas organizado, con bolsillos para las nuevas tareas y los deberes terminados, puede ayudar a que los trabajos lleguen a la meta.

No pierdas de vista los deberes. No es raro que un niño con TDAH se salte una fecha de entrega o malinterprete las instrucciones. Cree un plan de respaldo. Hable con el profesor de su hijo, semanalmente o incluso a diario, sobre las próximas tareas.

Algunos profesores publican los deberes en Internet. Otros pueden enviarle directamente a usted copias de las tareas por correo electrónico. Pídale al profesor que le informe sobre cualquier tarea que se retrase o que falte.

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