Descubra lo que necesita saber sobre la atención plena y cómo puede afectar a su salud en general.
El papel de la atención plena en tu salud mental
El mindfulness desempeña un gran papel en la mejora de tu salud mental en general. Según las investigaciones, esta práctica ayuda a las personas a controlar el estrés, la depresión, la adicción y la ansiedad. Ha demostrado ser eficaz en personas con problemas de salud como la hipertensión, el dolor crónico y la insuficiencia cardíaca.
La atención plena le ayuda a ser más consciente de lo que ocurre en el momento presente y a comprender sus patrones de pensamiento. Te permite salir de tu mente y observar esos patrones. De este modo, puedes darte cuenta de cuándo estás cayendo en un problema de salud mental.
Cuando se practica la atención plena, resulta fácil identificar las señales de estrés, ansiedad o depresión desde el principio. Te vuelves más positivo en la forma de responder a las señales de los problemas de salud mental. Es como hacer las paces con tu cuerpo escuchando y respondiendo a cada sensación que experimentas.
Los psicólogos y terapeutas de la salud mental recomiendan el mindfulness como forma de ayudar a curar y prevenir la depresión. Las investigaciones también demuestran que esta práctica te proporciona una actitud abierta y de aceptación. Eres capaz de aceptar cualquier cosa que surja, en lugar de intentar evitar o ignorar los problemas.
La atención plena puede enseñarte a gestionar tus emociones de forma que cambies positivamente tu comportamiento. Practicar técnicas de mindfulness, como las meditaciones guiadas, ayuda a mejorar tu conciencia y puede curar la pérdida de memoria.
Cambios en el estilo de vida para la atención plena
Todos queremos ser capaces de entender nuestros patrones de pensamiento y cómo influyen en nuestras acciones y percepción. Para alcanzar este nivel de conciencia, es necesario hacer algunos cambios en tu rutina diaria o adoptar nuevas prácticas. Aquí tienes algunos consejos para empezar:
Respiración consciente. Este ejercicio puede ser una forma estupenda y divertida de aprender mindfulness. Consiste en dedicar tiempo a concentrarse en la respiración y permitirse sentir cualquier sensación que recorra tu mente y tu cuerpo durante el proceso. Puedes contar el tiempo que transcurre entre la inhalación y la exhalación. Por ejemplo, si practicas la respiración consciente mientras caminas, puedes contar cinco pasos mientras inhalas y cinco pasos mientras exhalas.
Caminar con atención. Para empezar, camina lentamente mientras sientes todo lo que surge en tu cuerpo al dar cada paso. Siente la sensación en los músculos de los pies y la sensación de tu cuerpo al hacer contacto con el suelo. Si tu mente se aleja, intenta recuperarla concentrándote en la sensación de tus pies tocando el suelo.
Alimentación consciente. Esta técnica también es una forma estupenda de salir del piloto automático y disfrutar de la experiencia de la atención plena. El secreto consiste en prestar toda la atención a la hora de comer. Tómate el tiempo de observar los detalles de tu comida, siente el sabor, el olor, cómo se siente en tu boca y cuando baja por tu garganta. Cuando prestas toda tu atención a la comida, te das cuenta de que disfrutas más de la comida que cuando comes de forma pasiva.
Escuchar con atención. Esta es una forma muy popular de aumentar tu conciencia y mejorar tu atención plena. La escucha activa consiste en sintonizar con tu entorno y prestar atención a lo que tiene que decir. Puede ser una conversación en la que prestes mucha atención a lo que dice el interlocutor. Podrías hacerlo observando sus movimientos corporales y cómo pronuncia las palabras.
Otros consejos útiles sobre la atención plena
Además de los ejercicios de mindfulness mencionados anteriormente, estos consejos también podrían ser útiles para mantenerte concentrado:
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Practicar con regularidad
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Adoptar nuevos hábitos
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Controla tus pensamientos y ponle nombre a tus sentimientos
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Practica la meditación guiada y el yoga