Obtenga ideas prácticas que le ayuden a lidiar con los problemas comunes de las migrañas.
Gafas de sol para la sensibilidad a la luz
Las luces brillantes están en todas partes, y suelen desencadenar las migrañas de muchas personas. Si tienes fotofobia, o sensibilidad a la luz, las luces naturales y artificiales pueden provocar dolor de cabeza o empeorarlo.
Para controlar este riesgo, puedes llevar gafas de sol dentro y fuera de casa. Éstas pueden bloquear la luz dura y la luz azulada, que es el tipo de luz artificial más doloroso, de tus ojos.
También puedes probar las bombillas que emiten luz verde. Este es el único color que no ha demostrado empeorar el dolor de cabeza.
Otra buena idea es bajar el brillo de tus dispositivos. Utilizar la luz sutil de tu teléfono u ordenador puede ser una mejor manera de evitar una migraña.
Aunque no siempre podrás evitar las luces brillantes, puedes mantenerte alejado de ellas en la medida de lo posible. Si trabajas en una zona con luces artificiales brillantes, siéntate cerca de una ventana con luz natural que no sea tan deslumbrante. Aléjate de las fuentes de luz parpadeante y de las superficies que deslumbran.
Estrés
El estrés desencadena más del 70% de las personas con migrañas. Como no puedes hacer desaparecer el estrés, debes centrarte en controlarlo lo mejor y más rápido posible. Tenga un plan para lo que va a hacer en situaciones exigentes -ya sea en el trabajo, en su vida personal o mientras hace tareas o recados- para que no le pille desprevenido.
¿Puedes retirarte de la situación y calmarte antes de volver? ¿Respira profundamente cuando note que se siente estresado? ¿Llamar a un amigo o hacer un ejercicio rápido para liberarse del estrés lo antes posible? Conviene tener a mano varias estrategias antiestrés para poder elegir lo que funciona en cada momento.
También es una buena idea ordenar tus prioridades para detener el estrés antes de que empiece. Gestiona tu tiempo en el trabajo o en la escuela para entrar cada día con un plan.
Establezca su horario
Las migrañas podrían ser menos probables cuando mantienes las cosas consistentes. Si cambias tu rutina, es más probable que tengas un fuerte dolor de cabeza. Por esta razón, es importante mantener un plan similar para cada día. Mantenga el mismo horario de sueño, las mismas horas de ejercicio y mantenga una dieta saludable. También es conveniente que establezcas una rutina de tratamiento, de modo que tomes la medicación o las terapias a la misma hora cada día.
Desterrar los olores fuertes
Los olores fuertes de cosas como la comida y la colonia pueden desencadenar tu dolor de cabeza. No siempre es fácil escapar de estos olores, así que es importante estar preparado para adaptarse al entorno en el que te encuentras.
Ten a mano una bolsa de granos de café (si el olor del café no te molesta). Los granos de café neutralizan los olores, por lo que una rápida inhalación podría detener una migraña en su camino.
También puedes utilizar un bálsamo de menta para limpiar el aire que te rodea. Puedes ponerte un poco bajo la nariz para bloquear los olores fuertes.
También es una buena idea hablar sobre los desencadenantes de los olores. Pide a tus familiares y amigos que no se pasen con los perfumes y otros olores cuando estén cerca de ti. Explicarles lo que puede ser un desencadenante de la migraña es una forma sencilla de ofrecerles apoyo.
Revisa tu dieta
Los alimentos desencadenantes podrían causar tus migrañas. Cada persona es sensible a unos alimentos u otros, por lo que es importante hacer un seguimiento de lo que comes y de cómo responde tu cuerpo a ello. Lleva un diario de alimentos para registrar tus comidas y anotar cómo te sientes después. Esto le ayudará a saber qué es seguro y qué debe evitar. Aún así, debes obtener todos los nutrientes que tu cuerpo necesita, por lo que puedes consultar con un dietista registrado si ves que tienes muchos alimentos desencadenantes.
Prepárate si el aura te ataca
Algunas personas con migrañas tienen aura antes o durante el dolor de cabeza. Aunque no se ha demostrado que se pueda prevenir el aura, puedes calmar los efectos secundarios una vez que empiece. Cuando sientas los primeros síntomas, ve a una habitación oscura y tranquila. Duerma una siesta o descanse un rato. También puede utilizar un trapo frío o una bolsa de hielo en la frente o en la nuca. La hidratación también puede ayudar, así que asegúrate de beber suficiente agua u obtenerla de los alimentos.