el médico analiza la encopresis, una condición en la que los niños defecan fuera del inodoro, junto con otros trastornos de eliminación como la enuresis.
Los trastornos de la eliminación se producen en niños que tienen problemas para ir al baño, tanto para defecar como para orinar. Aunque no es infrecuente que los niños pequeños tengan "accidentes" ocasionales, puede haber un problema si este comportamiento se produce repetidamente durante más de tres meses, sobre todo en niños mayores de 5 años.
Existen dos tipos de trastornos de eliminación, la encopresis y la enuresis.
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Encopresis
es la expulsión repetida de heces en lugares distintos al inodoro, como en la ropa interior o en el suelo. Este comportamiento puede hacerse a propósito o no.
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Enuresis
es la expulsión repetida de orina en lugares distintos al inodoro. La enuresis que se produce por la noche, o enuresis nocturna, es el tipo más común de trastorno de eliminación. Al igual que con la encopresis, este comportamiento puede hacerse a propósito o no.
Cuáles son los síntomas de la encopresis?
Además de defecar en lugares inadecuados, un niño con encopresis puede presentar otros síntomas, como:
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Pérdida de apetito
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Dolor abdominal
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Heces sueltas y acuosas (deposiciones)
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Rascarse o frotarse la zona anal debido a la irritación producida por las heces acuosas
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Disminución del interés por la actividad física
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Alejamiento de los amigos y la familia
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Comportamiento reservado asociado a las deposiciones
Qué causa la encopresis?
La causa más común de la encopresis es el estreñimiento crónico (de larga duración), la incapacidad de liberar las heces del intestino. Esto puede ocurrir por varias razones, como el estrés, no beber suficiente agua (lo que hace que las heces sean duras y difíciles de expulsar) y el dolor causado por una llaga en el ano o cerca de él.
Cuando un niño está estreñido, se produce una gran masa de heces que estira el recto. Este estiramiento embota las terminaciones nerviosas del recto, y el niño puede no sentir la necesidad de ir al baño ni saber que los residuos están saliendo. La masa de heces también puede quedar impactada, es decir, demasiado grande o demasiado dura para expulsarla sin dolor. Finalmente, los músculos que mantienen las heces en el recto ya no pueden retenerlas. Aunque la masa fecal grande y dura no puede salir, las heces sueltas o líquidas pueden filtrarse alrededor de la masa impactada y sobre la ropa del niño.
Los factores que pueden contribuir al estreñimiento son:
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Una dieta baja en fibra
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La falta de ejercicio
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Miedo o reticencia a utilizar baños desconocidos, como los públicos
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No tomarse el tiempo para ir al baño
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Cambios en las rutinas de baño; por ejemplo, descansos programados para ir al baño en la escuela o el campamento
Otra posible causa de encopresis es un problema físico relacionado con la capacidad del intestino para mover las heces. El niño también puede desarrollar encopresis debido al miedo o a la frustración relacionados con el entrenamiento para ir al baño. Los acontecimientos estresantes en la vida del niño, como una enfermedad familiar o la llegada de un nuevo hermano, pueden contribuir al trastorno. En algunos casos, el niño simplemente se niega a ir al baño.
Qué frecuencia tiene la encopresis?
La encopresis es bastante común, aunque muchos casos no se denuncian debido a la vergüenza del niño y/o de los padres. Se calcula que entre el 1,5% y el 10% de los niños tienen encopresis. Es más frecuente en los niños que en las niñas.
Cómo se diagnostica la encopresis?
Si se presentan síntomas de encopresis, el médico comenzará una evaluación realizando una historia clínica completa y un examen físico. El médico puede utilizar ciertas pruebas, como las radiografías, para descartar otras posibles causas del estreñimiento, como un trastorno de los intestinos. Si no se encuentra ningún trastorno físico, el médico basará el diagnóstico en los síntomas del niño y en sus hábitos intestinales actuales.
Cómo se trata la encopresis?
El objetivo del tratamiento de la encopresis es prevenir el estreñimiento y fomentar los buenos hábitos intestinales. Educar al niño y a la familia sobre el trastorno es otra parte importante del tratamiento.
El tratamiento suele comenzar con la eliminación de las heces que han quedado impactadas en el colon, también llamado intestino grueso. El siguiente paso es intentar que las deposiciones del niño sean suaves y fáciles de evacuar. En la mayoría de los casos, esto se puede conseguir cambiando la dieta del niño, programando las visitas al baño y fomentando o premiando los cambios positivos en los hábitos de baño del niño. En los casos más graves, el médico puede recomendar el uso de ablandadores de heces o laxantes para ayudar a reducir el estreñimiento. Puede utilizarse la psicoterapia (un tipo de asesoramiento) para ayudar al niño a afrontar la vergüenza, la culpa o la pérdida de autoestima asociadas al trastorno.
Qué otros problemas se asocian a la encopresis?
Un niño con encopresis corre el riesgo de sufrir problemas emocionales y sociales relacionados con la afección. Pueden desarrollar problemas de autoestima, deprimirse, tener un mal desempeño en la escuela y negarse a socializar con otros niños, incluso no querer ir a fiestas o asistir a eventos que requieran pasar la noche. Las burlas de los amigos y las reprimendas de los familiares pueden agravar los problemas de autoestima del niño y contribuir a su aislamiento social. Si el niño no desarrolla buenos hábitos intestinales, puede sufrir estreñimiento crónico.
Cuál es el pronóstico para los niños con encopresis?
La encopresis tiende a mejorar a medida que el niño crece, aunque el problema puede ir y venir durante años. Los mejores resultados se producen cuando se abordan todos los problemas educativos, conductuales y emocionales. Un niño puede seguir teniendo algún accidente ocasional hasta que recupere... el tono muscular y el control de sus movimientos intestinales.
Se puede prevenir la encopresis?
La encopresis causada por el estreñimiento a menudo puede prevenirse asegurando que el niño beba cantidades adecuadas de agua y manteniendo una dieta rica en fibra. Aunque no siempre es posible prevenir la encopresis, recibir tratamiento en cuanto aparecen los síntomas puede ayudar a reducir la frustración y la angustia, así como las posibles complicaciones relacionadas con el trastorno. Además, ser positivo y paciente con el niño durante el entrenamiento para ir al baño puede ayudar a prevenir cualquier miedo o sentimiento negativo sobre el uso del baño.?