Descubra cómo hacer música y escucharla puede mejorar su salud mental.
La música es una poderosa herramienta para regular el estado de ánimo y el estrés. Lo mejor es que siempre está disponible para quien la necesite.
Beneficios de la música
Tanto si estás al límite como si necesitas un estímulo, incluso una sola canción puede devolverte a un lugar más equilibrado y saludable. Cuando se trata de tu salud mental, la música puede:?
Ayudar a descansar mejor. Un estudio en el que participaron estudiantes descubrió que escuchar música clásica relajante a la hora de acostarse mejoraba la calidad del sueño. Esta actividad también se asoció a la disminución de los signos de depresión.
Levantar el ánimo. Las investigaciones demuestran que escuchar música más alegre puede hacer que te sientas más feliz, especialmente si intentas levantar tu estado de ánimo mientras la escuchas. También hay pruebas de que la musicoterapia formal puede ayudar a combatir la depresión cuando se utiliza junto con otras terapias.
Reduce el estrés. Si te sientes ansioso o estresado, la música tranquilizadora puede ayudarte a calmar tu mente. Varios estudios han demostrado que cuando las personas que se someten a una intervención quirúrgica escuchan música relajante, tienen la presión arterial más baja y necesitan menos medicación para el dolor que los que no escuchan música relajante.
Sin embargo, no es necesario prepararse para una operación para calmarse con música. El simple hecho de escuchar música puede reducir la presión arterial, disminuir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y reducir el ritmo cardíaco.
Consejos para utilizar la música para mejorar tu bienestar
Los musicoterapeutas pueden ayudarte a encontrar formas de utilizar la música para tu salud mental. Este tipo de terapeuta aprende a utilizar la creación y la escucha de música para ayudar a las personas a entender y procesar sus emociones. Al igual que el asesoramiento tradicional en salud mental, la musicoterapia se adapta a las necesidades del cliente.
Pero no hace falta un terapeuta. También puedes utilizar la música por tu cuenta para mejorar tu bienestar mental:
Escuche música relajante. La mejor música para reducir el estrés es la que funciona para ti. Si no estás seguro de por dónde empezar, busca música que suene a unas 60 pulsaciones por minuto. Los investigadores afirman que este ritmo es el mejor para estimular las ondas cerebrales alfa que indican una mente relajada y consciente.
La mayoría de los servicios de streaming tienen pistas de meditación a este ritmo. Mucha gente también considera que la música celta, de los nativos americanos y de las cuerdas o flautas indias tiende a tener un efecto calmante.
Exprésate con un ritmo. No hace falta ser un músico experto para hacer música. Cualquiera puede coger un instrumento rítmico, como un tambor o un palo de lluvia, y crear ritmos lúgubres, enfadados, alegres o excitados...
Prueba esta técnica de musicoterapia: A solas o con algunos amigos, coge algunos instrumentos rítmicos y crea los sonidos de una tormenta. Deja que la tormenta se vuelva más y menos intensa, enfureciéndose durante un tiempo y luego retrocediendo hasta un estado más tranquilo. Crea ritmos que expresen las emociones que has sentido. Si quieres, puedes hablar de esos sentimientos después de que haya pasado la tormenta improvisada.
Escribir una canción. El concepto de escribir una canción puede asustar a la gente si cree que la canción no será buena. Recuerda que cuando utilizas la música de forma terapéutica, no importa lo que piensen los demás. Ni siquiera tienen que escucharla.
Si te sientes atascado, empieza con una canción que ya conozcas. Deja que la melodía te inspire para escribir una letra que exprese lo que sientes. Cántala en tu teléfono y reprodúcela. Escuchar tus propios sentimientos reflejados es una parte importante de la curación a través de la música.
Crea una lista de reproducción para tu estado de ánimo. Si te sientes deprimido, ansioso o molesto, busca una canción que exprese cómo te sientes. Siente esas emociones y deja que la letra resuene en ti. A continuación, cambia gradualmente tus opciones de escucha para que la música te lleve a un lugar más feliz o tranquilo. Esta es una técnica muy utilizada por los musicoterapeutas.
Límites de la música como potenciador del estado de ánimo
Hacer coincidir la música con tu estado de ánimo actual puede resultar validante, pero también puede mantenerte atrapado en un estado emocional negativo si lo permites...
Puedes escuchar una canción triste cuando estés disgustado o desahogarte con un tema de heavy metal. Sólo tienes que ser consciente de a dónde te lleva y cambiar a algo diferente si sientes que te quedas atascado.
También es importante tener en cuenta que, aunque la música puede ser una poderosa herramienta para regular y cambiar tus emociones, no es un sustituto del tratamiento de salud mental. Si tienes experiencias emocionales angustiosas que interfieren con tu capacidad para funcionar, considera la posibilidad de hablar con un profesional de la salud mental autorizado.