La cafeína es un estimulante, como muchos medicamentos para el TDAH. ¿Significa eso que también puede ayudar con los síntomas del TDAH? ¿Es segura para los niños?
El estimulante más utilizado, y la droga más popular del mundo, es la cafeína. Se encuentra en el café, el té, el chocolate, los refrescos y otros alimentos.
Algunos estudios han analizado cómo la cafeína puede afectar a los síntomas del TDAH, pero los resultados han sido contradictorios. Aunque la cafeína es un estimulante, generalmente no se recomienda como tratamiento para el TDAH porque no ha demostrado ser tan eficaz como los medicamentos recetados.
Cómo funciona
Los estimulantes, incluida la cafeína, aumentan la cantidad de sustancias químicas específicas que el cerebro utiliza para enviar señales. Una de ellas es la dopamina. Está relacionada con el placer, la atención y el movimiento.
Cuando se tiene TDAH, los médicos suelen recetar estimulantes para ayudar a sentirse más tranquilo y concentrado. Algunos investigadores creen que, como los estudios demuestran que la cafeína del té puede mejorar el estado de alerta y la concentración, también podría funcionar para el TDAH.
Algunos científicos creen que la cafeína tiene potencial como tratamiento del TDAH por su efecto sobre los niveles de dopamina, que mejoró la memoria y la atención en ratas. En otro estudio, cuando se administró cafeína a ratas hiperactivas antes de recorrer un laberinto, mejoraron en él. Esto sugiere que la cafeína puede mejorar el aprendizaje espacial. Aunque estos estudios son interesantes, las ratas no son personas.
El lado negativo
Más de 400 miligramos de cafeína son más propensos a causar problemas que incluyen:
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Dolores de cabeza por migraña
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Insomnio
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Irritabilidad
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Malestar estomacal
Un estudio descubrió que la cafeína era mucho menos eficaz que la dextroanfetamina (Dexedrine) y el metilfenidato (Concerta, Ritalin), dos tipos de medicamentos utilizados habitualmente para tratar el TDAH.
Para los niños
Los expertos no recomiendan dar cafeína a los niños, sobre todo si están tomando medicamentos recetados para el TDAH. Los niños pueden ser más vulnerables a los efectos secundarios de la cafeína. Y es posible que afecte al desarrollo cerebral de los niños en crecimiento.
Si bien un estudio anterior descubrió que dosis altas de cafeína (600 miligramos) diarias ayudaban a controlar los síntomas de hiperactividad en los niños, había muchos efectos secundarios.
Los niños con TDAH suelen tener más problemas de sueño y les cuesta mantenerse alerta durante el día. La cafeína puede alterar el sueño, lo que podría empeorar estos problemas.
La Academia Americana de Pediatría recomienda que ningún niño tome bebidas energéticas, ya que los altos niveles de estimulantes -incluida la cafeína- pueden causar graves problemas de salud.
¿Es adecuado para usted?
La cafeína, al igual que los medicamentos para el TDAH, puede afectar a una persona de forma diferente a otra. Habla con tu médico antes de empezar a consumir cafeína para aliviar tus síntomas.
Si estás tomando un estimulante recetado, tomar también cafeína podría causar más o peores efectos secundarios.