No dejes que el estrés te impida vivir la vida que te mereces. Descubre cómo mantener un equilibrio saludable entre el estrés diario y el pensamiento positivo.
Todos tenemos que lidiar con el estrés en el día a día. Lo que importa es cómo lo manejas.
Algunos tienen todos los movimientos correctos, ¿no es así? Sus problemas se diluyen como el hielo en un caluroso día de verano.
Si quieres ser uno de ellos, utiliza estos cinco consejos para poner el estrés en su sitio.
1. Aprende tus señales de alarma y actúa.
Sepa cuándo está a punto de estallar. Estás más irritable que de costumbre? Averigua qué es lo que te hace estallar.
Cuando sientas que el vapor sube, sal de la escena antes de que digas o hagas algo de lo que te arrepientas. Piensa en ello como una "pausa para respirar". Da un paseo de 10 minutos y respira profundamente, dice el doctor Raúl Seballos, especialista en medicina preventiva del Programa de Salud Ejecutiva de Cleveland Clinics.
2. Haz una rápida comprobación de la realidad.
No es el número de molestias lo que te hace. Es lo importante que crees que son, dice Carolyn Aldwin, directora del Centro de Investigación de Envejecimiento Saludable de la Universidad Estatal de Oregón.
Aprende a tomarte las cosas con calma, dice. Abandona esa perspectiva de que el cielo se está cayendo.
"La mayoría de las cosas que nos preocupan no van a suceder", dice la doctora Terri Wall, coordinadora de ciencias de la conducta en St. Vincent's Family Medicine, en Florida.
Podría ayudar el salir de su propia cabeza por un tiempo. Los hombres bajo presión tienden a aislarse, dice Wall. Eso lo empeora. Llame a un amigo y hable sobre el juego. ¿En la oficina? Charla con un colega durante unos minutos.
3. Escucha.
Esto es un salvavidas cuando tu cónyuge, pareja o colega se queja de algo. Los hombres tienden a ser "arregladores", pero no tienes que mejorar todo. A veces la otra persona sólo quiere hablar de ello. Le muestras respeto cuando le dejas hacer eso.
4. Poner en marcha la casa.
Deja el trabajo en la puerta y aléjate del sofá.
"El tiempo en familia reduce el estrés", dice el psicólogo de Denver Rich Driscoll, PhD. "Patea un balón de fútbol con tu hijo o arregla el grifo del agua. Tu día será más rico por ello".
5. Cuida de ti mismo.
Hazte revisiones médicas periódicas, come sano, no fumes y trata de dormir entre 7 y 9 horas cada noche.
Si no lo compruebas, el estrés puede hacerte más propenso a sufrir un infarto, tener la tensión alta y deprimirte. Podrías tener problemas para combatir una infección. Además, algunos hombres beben más alcohol, juegan y comen peor cuando están estresados. Todo ello puede suponer un gran problema.
Para evitarlos, tienes que encontrar una válvula de escape saludable. Muchos hombres descubren que hacer deporte o hacer ejercicio elimina el estrés. Incluso 10 minutos ayudan. "El ejercicio es el mejor Prozac que existe", dice Seballos. Él juega al baloncesto dos veces por semana para combatir el estrés y mantenerse en forma.
"Nunca es demasiado tarde para empezar a cambiar el estilo de vida. Lo que hagas ahora dará sus frutos en los próximos 5-10 años", afirma.