Cuando el cáncer se extiende a los pulmones

El cáncer de pulmón metastásico, o secundario, comienza en otra parte del cuerpo pero se extiende a los pulmones. Conozca los signos y síntomas, cómo tratarlo y cuál es el pronóstico para quien lo padece.

A veces, el cáncer que comienza en una parte del cuerpo, conocida como sitio primario, se extiende a otras partes. Esto se debe a que las células cancerosas pueden viajar, o hacer metástasis, a través del torrente sanguíneo o del sistema linfático.

Cuando esas células cancerosas primarias se desplazan a los pulmones, se denomina cáncer de pulmón metastásico o secundario. Es una enfermedad potencialmente mortal. Y se da en un tercio de las personas que mueren de cáncer.

El cáncer puede extenderse a cualquier parte de los pulmones. Y usted puede tener un tumor en un pulmón o muchos tumores en ambos pulmones. Pero la mayoría de las veces están en los bordes de los pulmones o en los lóbulos inferiores.

El cáncer de pulmón metastásico comenzó en otro lugar

Los tumores primarios pueden extenderse desde casi cualquier parte del cuerpo hasta los pulmones. Pero algunos tipos de cáncer son más propensos a crecer en sus pulmones. Estos incluyen:

  • Seno

  • Vejiga

  • Colon

  • Neuroblastoma

  • Próstata

  • Sarcoma

  • Intestino

  • Estómago

  • Hueso (osteosarcoma)

  • Cabeza y cuello

  • Riñón

  • Melanoma (cáncer de piel)

  • Sarcoma de tejidos blandos

  • Tiroides

  • Ovario

  • Sarcoma uterino

Síntomas del cáncer de pulmón

Al principio, es posible que no sepa que el cáncer se ha extendido a los pulmones. Eso es porque algunas personas no tienen síntomas. Si tiene síntomas, éstos pueden ser:

  • Tos continua

  • Falta de aliento o dificultad para respirar

  • Escupir sangre

  • Dolor en el pecho o en la caja torácica

  • Infecciones frecuentes en el pecho

También puede tener síntomas más generales, como fatiga, pérdida de apetito y pérdida de peso.

Por supuesto, todos estos son signos comunes de muchas otras condiciones médicas, desde leves hasta graves. Por eso es importante que consulte a su médico si tiene alguno de estos síntomas.

Diagnóstico del cáncer de pulmón metastásico

Después de que el médico le pregunte sobre su historial de salud y le haga un examen físico, puede hacer una o más pruebas clínicas para diagnosticar el cáncer de pulmón secundario. Estas suelen incluir:

  • Radiografía de tórax

  • Pruebas celulares de su mucosidad

  • Exploración por TEP

  • Análisis de sangre

  • Broncoscopia

  • Biopsia de pulmón con aguja

Estas herramientas ayudan al médico a encontrar el origen de las células cancerosas. Se parecerán a las células cancerosas del lugar primario, no a las del cáncer de pulmón.

Sus opciones de tratamiento

Cuando el cáncer se ha extendido a los pulmones, el tratamiento puede ayudar a controlar y frenar el crecimiento de las células cancerosas. También le ayuda a controlar los síntomas para que tenga una mejor calidad de vida.

Estas cosas controlan lo tratable que es el cáncer de pulmón:

  • El tamaño, el número y la ubicación de sus tumores primarios

  • Dónde se inició el cáncer

  • Cuán extendido está el cáncer

  • Qué tan saludables son sus pulmones en general

  • Sus síntomas

  • Tratamientos contra el cáncer que ya ha recibido

  • Cómo quiere tratar su cáncer

El cáncer que se ha extendido a los pulmones probablemente también esté en el torrente sanguíneo. Podría estar en lugares que no aparecen en las exploraciones de imagen. Por eso los médicos utilizan sobre todo la quimioterapia para tratar el cáncer de pulmón metastásico. Destruye las células cancerosas en todo el cuerpo.

La cirugía es menos frecuente. Los médicos la utilizan si los tumores están sólo en una pequeña parte del pulmón (lo llaman metástasis aislada o limitada). También puede ayudar cuando el cáncer primario es colorrectal, de huesos o de tejidos blandos.

Otras opciones de tratamiento son:

  • Terapia hormonal. Esto retrasa el crecimiento de ciertos tipos de células cancerosas y alivia sus síntomas.

  • Terapia dirigida. Utiliza medicamentos que se adhieren a las proteínas de las células cancerosas para detener o ralentizar su crecimiento.

  • Inmunoterapia. Utiliza el sistema inmunitario del organismo para destruir las células cancerosas.

  • Terapia de ablación. Destruye las células cancerosas o los tumores con láseres o corrientes eléctricas.

  • Radiación. Se utilizan rayos X de alta energía para destruir tumores.

  • Toracocentesis. En ella se utiliza una aguja para extraer el líquido del espacio entre los pulmones y la pared torácica.

  • Terapia de oxígeno. Te ayuda a respirar.

  • Stents. Abren las vías respiratorias estrechas.

Perspectivas del cáncer de pulmón metastásico

El cáncer de pulmón es la principal causa de muerte por cáncer en el mundo. No hay forma de prevenir el cáncer de pulmón, pero sí de tratarlo. Y hay motivos para la esperanza: Los médicos trabajan cada día en nuevos tratamientos. La inmunoterapia, que refuerza la capacidad del propio organismo para combatir el cáncer, se ha mostrado prometedora en los últimos años.

Las perspectivas de vivir con un cáncer de pulmón metastásico dependen en parte del lugar donde se originó el cáncer. Es raro, pero las personas con sarcoma, carcinoma de células renales, cáncer de vejiga, cáncer de colon o melanoma pueden curarse a veces con cirugía. Y la quimioterapia puede curar a algunas personas con cáncer que empezó en los testículos o en los ganglios linfáticos.

La mayoría de las personas con este tipo de cáncer pueden esperar vivir unos 5 años. Pero eso no tiene en cuenta los tratamientos más recientes, como la inmunoterapia, que refuerza los poderes del propio organismo para combatir el cáncer. Y tampoco refleja que cada persona es diferente. La respuesta al tratamiento depende del tratamiento que usted y su médico hayan elegido, de su estado de salud general en el momento del diagnóstico, de la rapidez con que se le haya diagnosticado y de la extensión del cáncer.

Vivir con cáncer de pulmón afecta a la salud mental, no sólo a la física. Por eso es fundamental tomar medidas para controlar el estrés y la ansiedad.

Unirse a un grupo de apoyo contra el cáncer o hablar en privado con un terapeuta son buenas formas de manejar sus sentimientos. Pídale a su médico que le sugiera opciones que puedan ser adecuadas para usted.

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