Si tiene dolor, debilidad o hinchazón alrededor de la articulación de la rodilla, es posible que necesite una resonancia magnética de la rodilla. Esto es lo que puede esperar de esta prueba de imagen.
RMN son las siglas de resonancia magnética. Es un tipo de exploración que utiliza un campo magnético, ondas de radio y un ordenador para crear imágenes detalladas del interior del cuerpo.
A diferencia de las radiografías, que toman imágenes de los huesos, la resonancia magnética de la rodilla permite al médico ver los huesos, cartílagos, tendones, ligamentos, músculos e incluso algunos vasos sanguíneos. La prueba puede mostrar una serie de problemas, entre ellos:
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Cartílago dañado
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Rotura de tendones o ligamentos
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Fracturas óseas
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Artrosis
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Infecciones
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Tumores
Su médico también puede pedir una resonancia magnética para ver si necesita una cirugía de rodilla, o para ver cómo se está curando después de la cirugía.
Qué ocurre durante una resonancia magnética
Una máquina de resonancia magnética típica parece un tubo grande y hueco. Con una bata de hospital o ropa holgada, se tumbará en una mesa de exploración que se desliza dentro del tubo. Para una resonancia magnética de la rodilla, entrará con los pies por delante y sólo la parte inferior del cuerpo estará en el tubo. Deberá permanecer inmóvil entre 15 y 45 minutos, a veces más, mientras la máquina toma imágenes de la rodilla.
En algunos casos, se le inyectará un tinte especial en el brazo antes del examen. Se trata de un agente de contraste que ayuda a que las imágenes de la rodilla sean aún más claras. Es posible que sienta una sensación de frescor después de recibir la inyección.
Durante el examen, suele estar solo en la sala. Un técnico de RMN estará fuera, realizando el examen desde un ordenador. Puede verle todo el tiempo y hablará con usted a través de un intercomunicador bidireccional.
No sentirá nada durante la exploración. Pero si es su primera resonancia magnética, le sorprenderá el ruido que hace. La máquina emite ruidos de golpes y zumbidos. El técnico probablemente le ofrecerá auriculares o tapones para los oídos. Si no lo hace, puede pedirlos.
Tras el examen, el técnico enviará las imágenes a un radiólogo, que enviará un informe a su médico. Podrá conducir hasta su casa y continuar su día como lo haría normalmente.
Retire todo el metal
No debe llevar metal durante la exploración. Puede interferir con el campo magnético de las máquinas. Asegúrese de quitarse cualquier elemento con metal antes del examen, como por ejemplo:
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Joyas
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Horquillas
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Cremalleras
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Perforaciones en el cuerpo
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Relojes
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Audífonos
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Navajas de bolsillo
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Gafas
Si tiene metal dentro de su cuerpo, como por ejemplo de metralla o de un dispositivo médico, asegúrese de decírselo a su médico o al tecnólogo antes de hacerse la RM. Es posible que aún pueda hacerse la prueba. Pero hay algunos tipos de implantes metálicos que hacen que no deba hacerse la prueba:
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Implante coclear
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La mayoría de los desfibriladores y marcapasos cardíacos
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Algunos tipos de clips metálicos, como los que tratan los aneurismas cerebrales
Otros consejos sobre la resonancia magnética de la rodilla
Las resonancias magnéticas son seguras para la mayoría de las personas. Pero tenga en cuenta estas preocupaciones:
Claustrofobia: Informe a su médico si tiene miedo a los espacios reducidos. Es posible que necesite tomar un medicamento antes de la prueba para calmar su ansiedad. El técnico de la RMN no le proporcionará este medicamento, por lo que tendrá que mencionarlo a su médico de antemano.
Embarazo: Informe a su médico si hay alguna posibilidad de que esté embarazada. Aunque las resonancias magnéticas se consideran seguras para las mujeres embarazadas, normalmente no se recomiendan durante el primer trimestre. Las mujeres embarazadas no deben recibir una inyección de medio de contraste a menos que sea absolutamente necesario.
Reacción alérgica: Si se le inyecta el medio de contraste antes del examen, existe un pequeño riesgo de que pueda tener una reacción alérgica. Su equipo médico puede tratarla rápidamente con medicamentos, así que asegúrese de informar al médico o al tecnólogo de la resonancia magnética si tiene algún síntoma alérgico, como picor, erupción cutánea, dificultad para respirar o un cambio en los latidos del corazón.