En el caso de la enfermedad de Crohn, a veces no hay síntomas y resulta tentador interrumpir el tratamiento. Pero los medicamentos funcionan mejor cuando los tomas siempre, para que tu enfermedad no empeore.
Probablemente tome medicamentos para controlar los síntomas y evitar que la enfermedad empeore.
Cuando los síntomas desaparecen, puede ser tentador dejar de tomar esos medicamentos. Pero los medicamentos funcionan mejor cuando los toma tal y como le dijo su médico. Mantienen la enfermedad bajo control y evitan las complicaciones. Por eso, si dejas de tomarlos, podrías tener una reagudización, lo que significa que los síntomas pueden volver a aparecer, como:
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Diarrea
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Calambres y dolor en el abdomen
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Fiebre
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Sensación de cansancio
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Sangre en las heces
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Pérdida de peso
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Náuseas o pérdida de apetito
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Llagas en la boca
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Dolor o molestias en las articulaciones
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Bultos rojos bajo la piel
Si deja de tomar su medicamento, la inflamación que causa su Crohn tampoco estará bajo control. Eso puede llevar a problemas más serios, incluyendo:
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Úlceras
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Abscesos
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Obstrucción en los intestinos
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Desnutrición
Es posible que tenga que ir al hospital para recibir tratamiento, que podría incluir una intervención quirúrgica.
Qué pasa si tengo efectos secundarios?
Uno de los principales objetivos del tratamiento de Crohn es mejorar tu calidad de vida. Y eso significa hacer que tus síntomas desaparezcan en la medida de lo posible.
Pero si tomas medicamentos que tienen efectos secundarios difíciles de sobrellevar, puede parecer una mala compensación, especialmente si tienes que lidiar con cosas como dolores de cabeza, aumento de peso y náuseas.
No dejes de tomar tus medicamentos si tienes efectos secundarios desagradables como éstos. En su lugar, habla con tu médico. Podrá ajustar la dosis o encontrar un nuevo medicamento que le funcione mejor.
Trabajar con tu médico
Aunque no tengas efectos secundarios, tomar la medicación habitual puede parecerte demasiado trabajo. Puede que te preocupe tomar tantos medicamentos, sobre todo si no has tenido un brote en mucho tiempo.
También puede haber momentos en los que el medicamento no parezca funcionar tan bien o aparezcan nuevos síntomas.
En lugar de interrumpir el tratamiento, consulte a su médico.
La enfermedad de Crohn es una enfermedad que evoluciona. Un tratamiento que funciona en un momento dado puede no funcionar a medida que avanza. Por eso es fundamental que le cuentes a tu médico cualquier cambio bueno o malo que tengas. También puede ayudar a su médico a elaborar un plan de tratamiento que funcione para usted.