El médico proporciona información sobre la hipertensión renal, incluidos los síntomas, las causas y los tratamientos.
Causas de la hipertensión renal
La hipertensión renal está causada por un estrechamiento de las arterias que llevan la sangre al riñón. Una o ambas arterias del riñón pueden estar estrechadas. Se trata de una afección denominada estenosis de la arteria renal.
Cuando los riñones reciben un flujo sanguíneo bajo, actúan como si éste se debiera a la deshidratación. Así que responden liberando hormonas que estimulan al organismo a retener sodio y agua. Los vasos sanguíneos se llenan de líquido adicional y la presión arterial aumenta.
El estrechamiento de una o ambas arterias renales suele estar causado por la aterosclerosis, o endurecimiento de las arterias. Es el mismo proceso que provoca muchos infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares. Una causa menos común del estrechamiento es la displasia fibromuscular. Se trata de una enfermedad en la que la estructura de las arterias renales se desarrolla de forma anormal por razones poco claras.
Síntomas de la hipertensión renal
La hipertensión renal no suele causar síntomas. El estrechamiento de las arterias no se puede sentir. A menos que sea peligrosamente alta, la hipertensión tampoco causa síntomas. Los síntomas de una presión arterial gravemente elevada incluyen:
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Dolor de cabeza
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Confusión
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Visión borrosa o doble
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Orina con sangre (de color rosa)
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Hemorragia nasal
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Dolor en el pecho
La gran mayoría de las personas con hipertensión renal nunca experimentan estos síntomas (ni ninguno). La hipertensión es peligrosa, en parte porque no hay síntomas, por lo que el daño a los órganos puede producirse lentamente sin ser reconocido.
La hipertensión renal puede provocar una enfermedad renal crónica. Se trata de un lento deterioro de la función renal. Hasta que la afección está muy avanzada, la enfermedad renal crónica tampoco causa síntomas.
Dado que no suele haber síntomas, el médico puede sospechar que existe hipertensión renal cuando alguien tiene la presión arterial alta no controlada a pesar de múltiples medicamentos o tiene una enfermedad renal crónica inexplicable.
Tratamientos para la hipertensión renal
Los medicamentos se utilizan en primer lugar para intentar controlar la presión arterial alta en la hipertensión renal. Los medicamentos para la presión arterial más importantes para tratar la hipertensión renal son:
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Inhibidores de la ECA
(inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina). Estos incluyen ramipril, benazepril, captopril, lisinopril y otros.
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ARBs
(bloqueadores de los receptores de la angiotensina II). Algunos ejemplos son candesartán, losartán, olmesartán y valsartán.
Para la mayoría de las personas con hipertensión renal debida al estrechamiento de la arteria renal, los medicamentos pueden controlar eficazmente la presión arterial. Sin embargo, a menudo se necesita más de un medicamento para la presión arterial.
En algunas personas con hipertensión renal debida al estrechamiento de la arteria renal, incluso la toma de tres o más medicamentos cada día puede no controlar adecuadamente la presión arterial. En estas situaciones, puede ser útil un procedimiento para mejorar el flujo sanguíneo a los riñones.
Los posibles procedimientos incluyen:
Angioplastia.
Un médico introduce un catéter por una arteria grande de la ingle y lo hace avanzar hasta la arteria renal. A continuación se infla un globo durante unos instantes. Esto ensancha la arteria y mejora el flujo sanguíneo.
Colocación de un stent.
Durante la angioplastia, se puede expandir un stent de malla metálica dentro de la arteria renal. El stent permanece en su sitio. Esto mantiene la arteria abierta después de retirar el globo. Sin embargo, las investigaciones no han demostrado que la colocación de un stent sea más eficaz que la medicación para la mayoría de las personas con hipertensión renal?
La cirugía.
Un cirujano puede puentear la arteria renal estrechada cosiendo un vaso sanguíneo sano junto a ella. Por lo general, la cirugía se considera sólo cuando la angioplastia y el stent no son posibles, y es
sólo en raras ocasiones
realizados.
Estos procedimientos son similares a los utilizados para mejorar el flujo sanguíneo en el corazón en personas con enfermedad arterial coronaria.
Resultados del tratamiento
Para las personas cuya presión arterial no se controla con múltiples medicamentos o para las que no toleran la medicación para la presión arterial, un procedimiento puede ser una solución eficaz para la hipertensión renal...
Si es necesario un procedimiento, la estenosis de la arteria renal... casi siempre se trata con una endoprótesis o una angioplastia. Sin embargo, en la mayoría de los estudios no se ha demostrado que la colocación de un stent o una angioplastia sea beneficiosa en comparación con el tratamiento médico. No obstante, puede tener un papel en el tratamiento de algunas personas.