¿Pueden las madres que tienen esta infección vírica amamantar a sus bebés? Estos son los datos y las cosas que hay que tener en cuenta para proteger la salud del bebé.
¿Es segura la lactancia materna?
Sí, puedes amamantar a tu bebé sin preocuparte. El VHC, el virus que causa la hepatitis C, no se propaga a través de la leche materna. Los estudios también demuestran que los bebés amamantados no tienen tasas más altas de hepatitis C que los alimentados con fórmula.
El virus se transmite a otras personas cuando la sangre de una persona infectada entra en la sangre de alguien que no está infectado. Los bebés pueden contraer el virus de sus madres durante el parto: aproximadamente 6 de cada 100 bebés nacidos de madres con hepatitis C se infectan. Pero las investigaciones demuestran que la lactancia materna no causa infecciones.
Otras formas de contagio de la hepatitis C son:
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Compartir agujas o jeringuillas
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Lesiones por pinchazo de aguja, que pueden tener lugar en entornos sanitarios
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Hacerse un tatuaje o una perforación corporal si las herramientas no se limpian adecuadamente
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Contacto sexual con una persona infectada
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Compartir objetos personales que puedan tener sangre de alguien, como una maquinilla de afeitar o un cepillo de dientes
Qué pasa si tengo los pezones agrietados o sangrantes?
Es un problema común para las madres lactantes. Las investigaciones no dicen directamente si se puede seguir dando el pecho o no. Pero los expertos dicen que lo más seguro es dejar de hacerlo hasta que los pezones se curen. Para evitar que la leche se seque, sácate la leche y tírala.
También es mejor dejar de dar el pecho si:
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Tienes una infección como la mastitis, o el tejido mamario inflamado
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Su seno está magullado o lesionado
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Notas cortes en la boca de tu bebé
No dude en volver a dar el pecho una vez que esté libre de síntomas.
Necesito hacer la prueba de la hepatitis C a mi hijo?
Si tiene hepatitis C, el médico de su hijo probablemente le recomendará que se haga la prueba del virus cuando tenga 18 meses.
Hay algunas pruebas que pueden utilizar:
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Anti-VHC. Esta es la primera prueba que le harán a su hijo. Busca anticuerpos contra el VHC, lo que le indica si su hijo ha estado expuesto al virus. Si los resultados son negativos, su hijo no tiene hepatitis C. Si son positivos, su bebé necesitará más pruebas para ver si está actualmente infectado.
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VHC-ARN. Su hijo se someterá a esta prueba si los resultados del anti-VHC fueron positivos. Busca el virus en la sangre de su hijo. Los resultados positivos significan que su hijo tiene una infección activa por hepatitis C.
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La prueba de carga viral, que comprueba la cantidad de virus que hay en la sangre de su hijo. Si la prueba del VHC es positiva, los médicos utilizarán esta prueba para ver si el tratamiento está funcionando.
Cómo mantener la seguridad de tu bebé
Si su hijo tiene hepatitis C, hay un 25% de posibilidades de que el virus desaparezca por sí solo. Si no lo hace, hay algunas cosas que puede hacer para proteger su salud. Debe acudir al médico con frecuencia, hacerse análisis de sangre periódicos y tomar los medicamentos que le recete. Con el tratamiento adecuado, la hepatitis C es curable. Por ello, colabore con el médico de su hijo desde el principio para combatir la infección y ayudar a su pequeño a evitar otros problemas de salud que la hepatitis C puede causar.
También puedes mantener a tu bebé a salvo controlando tu salud. Evite el alcohol y tome los medicamentos antivirales que le recete su médico. Si está embarazada pero no está segura de tener hepatitis C, pida a su médico que le haga una prueba del VHC.