Respuestas a las preguntas más frecuentes sobre la epilepsia.
La epilepsia es una enfermedad crónica (de larga duración) caracterizada por crisis epilépticas recurrentes. Un ataque epiléptico es un evento de alteración de la función cerebral causado por descargas eléctricas anormales o excesivas de las células cerebrales. La epilepsia es uno de los trastornos neurológicos más comunes, que afecta hasta al 1% de la población estadounidense.
Existen diferentes tipos de crisis, diferentes tipos de síndromes epilépticos y diferentes causas de epilepsia. Por ejemplo, tanto los tumores cerebrales como los derrames cerebrales pueden causar convulsiones y provocar una epilepsia crónica. Algunas de las causas pueden diagnosticarse y tratarse con medicamentos y otras requieren cirugía.
2. ¿Qué causa la epilepsia?
Aproximadamente el 65% de las personas recién diagnosticadas de epilepsia no tienen una causa evidente. Del 35% restante, las razones más comunes son los accidentes cerebrovasculares, las anomalías congénitas (condiciones con las que nacemos), los tumores cerebrales, los traumatismos y las infecciones.
3. ¿Quién trata la epilepsia?
Un neurólogo, médico especializado en el cerebro y el sistema nervioso, es el más indicado para diagnosticar y tratar la epilepsia. Algunos neurólogos siguen una formación avanzada y se convierten en epileptólogos, especialistas en el diagnóstico y tratamiento de la epilepsia. Muchos internistas y médicos de familia también tratan la epilepsia.
4. Cómo se diagnostica la epilepsia?
Para diagnosticar la epilepsia, los médicos tratan de determinar el tipo de crisis que tiene y la causa, ya que los distintos tipos de crisis responden mejor a tratamientos específicos. El diagnóstico se basa en su historial médico y en un examen físico y neurológico completo.
A menudo pueden ser necesarias pruebas adicionales, como un electroencefalograma (EEG). El EEG es la única prueba que puede detectar directamente la actividad eléctrica del cerebro (las convulsiones se definen por una actividad eléctrica anormal en el cerebro). Durante un EEG, se colocan electrodos (pequeños discos metálicos) en lugares específicos de la cabeza. Los electrodos también se conectan a un monitor para registrar la actividad eléctrica del cerebro. El médico puede solicitar pruebas de imagen del cerebro, como una resonancia magnética o un TAC craneal.
Si queda inconsciente durante una convulsión, otras personas que le hayan visto a menudo antes, durante y después de las convulsiones, como sus familiares y amigos cercanos, deben estar presentes para dar detalles de sus convulsiones.
5. Cómo se trata la epilepsia?
La mayoría de las crisis epilépticas se controlan con terapia farmacológica, en particular con medicamentos anticonvulsivos. El tipo de tratamiento prescrito dependerá de varios factores, como el tipo de epilepsia, la frecuencia y la gravedad de las crisis, su edad, su estado general de salud y su historial médico. Un diagnóstico preciso del tipo de epilepsia (no sólo del tipo de crisis, ya que la mayoría de los tipos de crisis se dan en diferentes tipos de epilepsia) es fundamental para elegir el mejor tratamiento.
6. ¿Qué precauciones deben tomar las mujeres embarazadas?
Las mujeres que tienen convulsiones pueden tener hijos sanos, siempre que reciban una buena atención prenatal. Es muy importante que las mujeres que tienen epilepsia hablen del embarazo con sus médicos antes de quedarse embarazadas.
Muchos medicamentos anticonvulsivos pueden impedir que las píldoras anticonceptivas funcionen eficazmente, lo que puede provocar un embarazo no planificado. Si el embarazo se produce de forma inesperada, las mujeres no deben interrumpir su medicación anticonvulsiva sin consultar antes con sus médicos. La interrupción brusca de la medicación anticonvulsiva suele provocar convulsiones más frecuentes, que pueden dañar al bebé.
7. Qué es la cirugía de la epilepsia?
La cirugía de la epilepsia consiste en la extirpación quirúrgica de la región del cerebro responsable de las señales eléctricas anormales que provocan las crisis. Esta región del cerebro se denomina zona epileptógena. Se determina mediante estudios de neuroimagen, registros eléctricos del cuero cabelludo (EEG) y signos clínicos durante una crisis. La cirugía de la epilepsia puede proporcionar una "cura" para la epilepsia, en el sentido de que puede eliminar la fuente de los ataques y la epilepsia.
La cirugía también puede realizarse para implantar dispositivos para tratar la epilepsia. En la estimulación del nervio vago (ENV), se implanta bajo la piel un dispositivo que estimula electrónicamente el nervio vago (que controla la actividad entre el cerebro y los principales órganos internos). Esto reduce la actividad convulsiva en algunos pacientes con crisis parciales. También existe el dispositivo de neuroestimulación reactiva (RNS), que consiste en un pequeño neuroestimulador implantado dentro del cráneo bajo el cuero cabelludo. El neuroestimulador está conectado a uno o dos cables (llamados electrodos) que se colocan en los lugares donde se sospecha que se originan las convulsiones dentro del cerebro o en la superficie del mismo. El dispositivo detecta la actividad eléctrica anormal en la zona y suministra estimulación eléctrica para normalizar la actividad cerebral antes de que comiencen los síntomas de las convulsiones.
8. Cuáles son los efectos secundarios de los medicamentos para la epilepsia?
Como ocurre con todos los fármacos, los medicamentos utilizados para tratar la epilepsia tienen efectos secundarios. La aparición de efectos secundarios depende de la dosis, el tipo de medicamento y la duración del tratamiento. Los efectos secundarios empeoran con dosis más altas, pero tienden a ser menos graves con el tiempo, a medida que el cuerpo se adapta a la medicación. Los fármacos antiepilépticos suelen iniciarse con dosis bajas y aumentarse gradualmente para facilitar esta adaptación.
Los efectos secundarios de los medicamentos contra la epilepsia pueden incluir visión borrosa o doble, fatiga, somnolencia, inestabilidad, malestar estomacal, erupciones cutáneas, recuentos bajos de células sanguíneas, problemas hepáticos, inflamación de las encías, pérdida de cabello, aumento de peso y temblores.
9. Existen tratamientos alternativos para la epilepsia?
Se han realizado algunos estudios que evalúan la eficacia de los tratamientos alternativos para la epilepsia, como la biorretroalimentación, la melatonina o las grandes dosis de vitaminas. Los resultados no han sido prometedores.