En los últimos años se han producido varios avances en la investigación sobre el origen y los tratamientos de esta enfermedad cutánea que provoca picores.
En los últimos años, los investigadores han aprendido más sobre las causas del eczema y los desencadenantes que desencadenan los brotes de enrojecimiento y picor. Sus descubrimientos están allanando el camino hacia nuevos métodos para prevenir y tratar el eczema.
Buscando la causa
Uno de los factores que contribuyen al eczema es la escasez de grasas y otros elementos en las capas de la piel que protegen la barrera exterior de la misma. Cuando estos elementos escasean, las bacterias pueden introducirse en las grietas de la piel.
Recientemente, los investigadores han descubierto que la presencia de bacterias en la piel no es sólo un resultado del eczema, sino también una posible causa. Una vez dentro, las bacterias pueden irritar e inflamar la piel.
Cómo prevenir el eczema
Algunas investigaciones para prevenir el eczema se centran en los antecedentes familiares y los genes. Los investigadores creen que ciertos genes que se obtienen de los padres aumentan el riesgo de padecer eczema. Luego, los factores ambientales desencadenan la enfermedad.
Un gen importante es el FLG, que ayuda a mantener la piel húmeda y evita la entrada de alérgenos, bacterias y otras sustancias nocivas. Un cambio o mutación en este gen puede aumentar el riesgo de eczema.
Los científicos han descubierto recientemente otros 118 genes relacionados con el eczema y la psoriasis, otra enfermedad de la piel que se da en familias. También descubrieron variantes en el gen KIF3A que debilitan la barrera natural de la piel. Esto hace que la piel pierda agua y se reseque.
Los investigadores siguen encontrando nuevos genes relacionados con el eczema. Estos genes podrían ayudar a los expertos a conocer mejor las causas del eczema y a encontrar nuevas formas de tratarlo. Algún día los científicos podrían desarrollar una prueba genética que permita predecir qué niños desarrollarán eczema. O podrían desarrollar un fármaco que desactivara los genes que contribuyen a causar esta enfermedad de la piel.
Nuevos tratamientos
Unos cuantos medicamentos nuevos están cambiando la forma en que los médicos tratan el eczema.
Anticuerpos monoclonales
Hasta 2017, las opciones de medicación para el eczema eran prácticamente sólo esteroides y cremas contra el picor. Entonces, la FDA aprobó dupilumab (Dupixent), un tipo de medicamento llamado anticuerpo monoclonal. Se inyecta bajo la piel. Bloquea dos sustancias químicas del sistema inmunitario que causan la inflamación en las personas con eczema.
Otros dos fármacos que actuarían de la misma manera, el lebrikizumab y el tralokinumab, están en fase de desarrollo. Otro fármaco, el nemolizumab, que aún está en fase experimental, bloquea una proteína que provoca el picor en el eczema.
Inhibidores de la JAK
La próxima gran novedad en el tratamiento del eczema es un grupo de fármacos llamados inhibidores de la Janus quinasa (JAK). Pueden bloquear las proteínas JAK. Estas sustancias provocan la liberación de sustancias químicas que inflaman la piel en el eczema.
Algunos inhibidores de la JAK se encuentran en las últimas fases de los ensayos clínicos para el eczema. Las investigaciones realizadas hasta ahora muestran que aclaran la piel y reducen el picor. Un fármaco experimental, el abrocitinib, alivió el picor mejor que el Dupixent en un estudio. Los inhibidores de JAK se presentan en forma de píldora y crema, en lugar de una inyección como el Dupixent.
Los inhibidores de JAK ya son un tratamiento para la artritis reumatoide y la artritis psoriásica.
Gérmenes útiles
Los investigadores saben desde hace tiempo que las personas con dermatitis atópica tienen un gran número de bacterias estafilocócicas viviendo en su piel. Estas bacterias no sólo causan infecciones, sino que también desencadenan las respuestas inmunitarias que aumentan la inflamación y el enrojecimiento.
Ahora los científicos están estudiando si las bacterias útiles, llamadas probióticas, podrían eliminar las dañinas en la piel y ayudar a tratar esta enfermedad. Los estudios realizados en ratones y en células humanas demostraron que un tipo de bacteria llamada Roseomonas mucosa mejoraba los síntomas del eczema y reducía la necesidad de tomar medicamentos con esteroides en los niños. Futuros estudios deberían arrojar más luz sobre si las bacterias son un tratamiento seguro y eficaz del eczema.
Tratamientos alternativos
También se buscan remedios no farmacológicos que alivien el enrojecimiento y el picor del eczema. Algunas terapias alternativas han mostrado efectos positivos en los estudios, entre ellas:
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Sándalo de las Indias Orientales
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Aceite de onagra
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Miel de Manuka
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Vitaminas B12, D y E
Aunque estos tratamientos parecen prometedores, todavía no hay suficientes pruebas para recomendar el uso de ninguno de ellos para el eczema.
